"Lo último que queremos es que Sudamérica se convierta en una zona de guerra que, inevitablemente, no sería solo un conflicto entre Estados Unidos y Venezuela, sino que terminaría en una participación global. Eso sería realmente lamentable" declaró Celso Amorim, canciller en el primer mandato de Lula da Silva y su actual asesor especial en política internacional.
"Conozco Sudamérica… todo nuestro continente existe gracias a la resistencia contra los invasores extranjeros", dijo Amorim, y cualquier ataque estadounidense reavivaría un sentimiento anti norteamericana en Latinoamérica”.
En una entrevista con The Guardian, el diplomático calificó como “acto de guerra” la reciente decisión de Donald Trump, de ordenar el cierre del espacio aéreo venezolano, y expresó su temor a que la crisis recrudezca las próximas semanas.
Para el consejero presidencial, si hubiera una invasión real “sin duda se vería algo similar a Vietnam”. Desde agosto último, la Casa Blanca ha reunido más de una docena de buques de guerra y unos 15.000 efectivos militares frente a las costas de Venezuela como parte de su Operación Lanza del Sur.
De hecho, lanzó el mayor despliegue naval en el Caribe desde la crisis de los misiles de Cuba en 1962. Peor aún, llevó a cabo una serie de ataques aéreos mortales contra supuestos barcos cargados de drogas que han matado a más de 80 personas.
Además del enorme contingente militar, reunido frente a Caracas por Washington que sostiene que Maduro es un gobernante ilegítimo vinculado a los cárteles, Trump ha autorizado a la CIA a realizar letales operaciones encubiertas en la zona.
Según el secretario de Guerra de Estados Unidos, Pete Hegseth, “cada traficante que matamos está afiliado a una organización terrorista”. Y es por esa razón que “estos ataques altamente efectivos fueron específicamente pensados para ser letales”.
Juan Guaidó: "Nicolás Maduro está en la misma lista de terroristas que Saddam Hussein y Bin Laden"
El funcionario cuestionó, además, al diario americano Washington Post porque este medio afirmó que el secretario había ordenado a las unidades militares "matar a todos" en los supuestos barcos de narcotráfico en el Caribe a principios de septiembre. Pero semejante procedimiento se ha tornado sospechoso, al punto que miembros de alto rango del Comité de Servicios Armados del Senado de Estados Unidos han dicho que investigarán estos incidentes, como parte de la Operación Lanza del Sur dirigida presuntamente contra narcoterroristas”.
Amorim, el asesor del presidente Lula, sostuvo que su gobierno se opone en forma terminante a cualquier cambio de régimen que se pretenda forzar. Esto vino a propósito de los cuestionamientos a las elecciones último que dieron el triunfo al jefe de Estado venezolano, una victoria que muchos países llegaron a cuestionar, entre ellos Brasil. Pero mismo con ese reconocimiento de las dudas en cuanto a la veracidad de los resultados de esos comicios, el diplomático fue contundente: “Si cada elección dudosa desencadenara una invasión, el mundo estaría en llamas”.
Para Amorim, cuyas declaraciones a The Guardian fueron a “título personal”, “si Maduro llega a la conclusión de que dejar el poder es lo mejor para él y para Venezuela, esa será su conclusión. Pero Brasil nunca lo impondrá; nunca dirá que es un requisito. No vamos a presionar para que Maduro renuncie o abdique”.
Cuando lo indagaron acerca de si Brasil podría ser una opción para el asilo político, el ex canciller indicó que prefería no especular "para no parecer que alienta" la idea. Aclaró, sin embargo, que “el asilo es una institución latinoamericana tanto para personas tanto de derecha como de izquierda", y recordó que el ecuatoriano Lucio Gutiérrez recibió refugio en Brasil tras ser depuesto como presidente en 2005: "Incluso enviamos un avión a recogerlo".
Según los medios internacionales, se ha especulado sobre el posible destino de Maduro en caso de abandonar el poder. Y se ha mencionado como destinos a Cuba, Turquía, Qatar y Rusia.