Dos reformas sustanciales propuso el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, durante su discurso en la Asamblea General de la ONU: restringir el poder de veto del Consejo de Seguridad y una ampliación de ese cuerpo con miembros permanentes de América Latina y el Caribe y África.
El Consejo de Seguridad está formado en forma permanente por Estados Unidos, Rusia, China, el Reino Unido y Francia. El poder de veto significa que un solo miembro puede impedir una resolución, como ocurrió con la protección de Siria a pesar de haber violado los derechos humanos.
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Con el foco puesto en la guerra en Ucrania, Biden llamó a la comunidad internacional a ponerle un freno a los afanes de Vladimir Putin frente a la posibilidad de vulnerar la soberanía del país invadido.
El discurso de Biden coincidió con una dramática escalada en el conflicto por la amenaza de Putin de usar armas nucleares y la movilizaron de 300.000 reservistas para reforzar el frente en Ucrania.
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