OPINIóN
Formas de concebir el mundo

Los pandemials: un nuevo individuo

El coronavirus nos empujó hacia un proceso de reconversión multidimensional dando origen a una nueva forma de afrontar la incertidumbre: los pandemials.

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Estrategia. El objetivo será controlar que se cumpla el distanciamiento social y la prevención. | telam

El concepto “Pandemial” surge en nuestros días para definir al nuevo individuo. Para definir al proceso de reconversión de la sociedad a partir de las consecuencias que la pandemia del Covid-19, que acechó al mundo de forma disruptiva, comenzó a generar desde un principio, y que se continúa forjando al día de hoy sin un horizonte de desenlace claro. 

Su esencia no recae en la familiaridad del concepto con las etiquetas existentes de las diferentes generaciones a lo largo de los años, como lo fuesen millennial o centennial. Es decir, no refiere a una mera titulación del nacimiento una nueva generación a partir de este evento masivo, sino en el proceso de transformación cuantitativa y cualitativa que las sociedades mundiales pre-pandemia han comenzado a transitar durante esta etapa.

La necesidad de reconvertir nuestra forma de pensar, actuar y existir se convirtió en una prioridad para lograr sobrevivir y afrontar las diferentes adversidades que se presentaron en el camino desde que este fenómeno apareció en nuestras vidas.

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El pandemial se compone de un gran porcentaje de creatividad y espíritu crítico

Sin lugar a dudas, el cambio de paradigma que comenzó a gestarse desde principios de año generó un impacto transversal y multidimensional que reconvirtió concepciones, visiones, conductas y emociones que nos definían como personas y como cuerpo social.  

Todos hemos pasado por instancias de reflexión y autoconocimiento. El propio contexto nos ha hecho replantear todo lo que nos rodea. Nuestra mente se encuentra atravesando un océano turbulento que demanda inteligencia y acción proactiva para sortear la tormenta y definir, al mismo tiempo, la dirección del barco.

La transformación es inevitable. No podemos ir en contra de la corriente. ¿O acaso podemos frenar el avance de la tecnología? ¿Podemos volver atrás tendencias como la digitalización de la información o la reconfiguración del trabajo o la educación? Son procesos que tienen fuerza y motricidad propia.

Ahora bien, lo que sí podemos hacer es aprender de qué manera y cómo, utilizando la creatividad, el pensamiento crítico y la preciada capacidad de resiliencia que esta situación nos hizo adquirir, podemos llegar a nuestro destino deseado.

El mindset pandemial se compone de un gran porcentaje de creatividad y espíritu crítico. Se nutre permanentemente de la estimulación y ejercitación constante para explorar los diferentes futuros posibles y anticiparse a los cambios. También posee un alto grado de inteligencia emocional donde el autoconocimiento de las emociones propias y de las ajenas es vital para lograr una sociabilización colectiva integradora y comunitaria.

El empoderamiento constante y compartido de la mente transformada es el vehículo para construir sociedades resilientes, con conciencia colectiva y visión de futuro. Si trabajamos permanentemente en hacer más fuertes nuestros barcos, más fácil será afrontar la volatilidad de los mares.

Para ello necesitamos, primero, asumir que ya no somos los mismos. Que las cosas ya no serán igual que antes. Que todo se ha reconvertido. Lograr esto es un desafío cognitivo extremadamente complejo.

El cambio empieza por la mente. Lo único que debemos hacer es utilizar esa incertidumbre para empoderar nuestras capacidades

Tener las cosas poco claras, es decir que exista incertidumbre sobre las condiciones actuales y futuras del océano, a veces nos genera incomodidad, temor y hasta desesperación. Por más que sea difícil, debemos entender que eso está bien que así sea. Que nuestra mente tenga ese desafío constante de aprender a interpretar y accionar en un contexto de estas características, nos brinda un poder de construcción creativa inimaginable.

Pero, ¿Por dónde comienza el cambio? El cambio empieza por la mente. Lo único que debemos hacer es utilizar esa incertidumbre y ambigüedad, en donde nuestra mente se siente rara, para empoderar nuestras capacidades y sembrar, en ese terreno fértil, la semilla de la resiliencia individual y colectiva.

Como capitanes de nuestro propio barco, debemos anticiparnos a los posibles cambios que el océano pueda tener y preparar a nuestra tripulación para navegar en la oscuridad de un mapa cada vez más complejo e inentendible.

A partir de hoy, de una u otra manera, todos somos pandemials. El primer paso para adaptar nuestro mindset es animarnos a generar un cambio y convertirnos en agentes de él. Esto requiere de mucho valor, compromiso y constancia individual y colectiva.