Rocío Villarreal se encontraba en la oficina de guardia de la Comisaría de San Justo a las 5 de la mañana de este lunes, cuando una banda de cuatro personas irrumpió el establecimiento a los tiros y desató una balacera en la que la policía resultó herida de dos disparos.
La mujer de 25 años recibió un tiro en el antebrazo y otro en el abdomen, por lo que tuvo que ser operada en el Hospital Paroissien de Isidro Casanova. Luego fue trasladada al Churruca, ya que una de las balas le habría rozado la médula, por lo que requiere una atención de mayor complejidad.
Según aclaró el jefe de la Policía Bonaerense, Fabián Perroni, Villarreal se encontraba estable, aunque en terapia intensiva y un estado muy delicado. Perroni agregó que los delincuentes "le tiraron directamente" a la sargento cuando salió a atenderlos. Además, el jefe policial señaló que los intrusos actuaron "con un total desprecio por la vida".
"Tuvo lesiones en varios órganos vitales, como el hígado, el riñón y el pulmón. Está consciente y pudo hablar lo necesario. Pero está internada en terapia intensiva y su estado delicado", aseveró el jefe de Guardia del Fitz Roy, Pablo Mollietty, en diálogo con Todo Noticias.
La policía de 25 años tiene una hija de 3 años y viven en Isidro Casanova. En 2013, cursó sus estudios como cadete de policía en la escuela Vucetich y al año siguiente empezó a prestar servicios en la Jefatura Distrital Este de La Matanza. Más adelante, pasó a integrar el Grupo de Apoyo Departamental, en el mismo partido. Desde agosto de 2016, trabaja en la dependencia de San Justo. Al momento de ser atacada, no llevaba puesto el chaleco antibalas porque cumplía tareas dentro de la comisaría.
El tiroteo. Según informaron fuentes policiales a la agencia Noticias Argentinas, al lugar llegaron al menos cuatro sujetos provistos de pistolas, y vestidos de policías con boinas y camperas con inscripciones de la fuerza. Los falsos policías intentaron reducir a los cinco efectivos que se encontraban de guardia en la seccional, pero éstos se resistieron.
"¡Quédense quietos!", les gritaron los intrusos a los cuatro policías. En ese momento, se originó un enfrentamiento a tiros en el ingreso a la oficina del oficial de servicio, en el que una sargento primera Rocío Villarreal fue gravemente herida al recibir recibió un disparo en el abdomen.
Los delincuentes fueron rechazados a los tiros y escaparon con rumbo desconocido, tres de ellos en un Volkswagen Gol Trend que habían dejado a pocos metros de la seccional y un cuarto a pie.
El vínculo con la barra de Almirante Brown. Si bien no está clara la intención de los asaltantes, una de las hipótesis, según trascendió, apunta a que son allegados a barrabravas del club Almirante Brown. Días atrás, 20 presuntos integrantes de la la barra brava de Almirante Brown fueron detenidos tras una serie de allanamientos realizados en la localidad bonaerense de Isidro Casanova, en los que se logró secuestrar una gran cantidad de cocaína, marihuana y armas de grueso calibre.