La sede de Madres de Plaza de Mayo fue allanada en la mañana de este lunes por orden del juez Javier Consentino, para realizar un inventario sobre los bienes de la fundación, en el marco de la causa que investiga la quiebra de la organización que lidera Hebe de Bonafini.
La orden del magistrado de feria advierte que cualquier “tipo de riesgo en la conservación de los bienes inventariados" puede ser motivo para que los encargados del operativo procedan con “la inmediata clausura del inmueble y/o de los sectores donde se encuentren depositados" y "requerir el auxilio de la fuerza pública".
En tanto, Bonafini se enteró el domingo del allanamiento y por ese motivo decidió pasar la noche en la sede ubicada en Hipólito Yrigoyen al 1578, según informó la agencia Noticias Argentinas.
Mientras que, esta mañana se autoconvocaron personas provenientes de Universidades, sindicatos y abogados para impedir que se lleve adelante la orden de la Justicia, que solicitó el accionar de la fuerza pública para ingresar. Finalmente cuatro funcionarios judiciales lograron entrar en la entidad para realizar el registro patrimonial. "Esto viola manifiestamente las garantías constitucionales", aseguraron las Madres mediante las redes sociales.