La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner pidió copias de una vieja causa en el fiscal Alberto Nisman había denunciado al juez federal Claudio Bonadio por una presunta maniobra para apartarlo de la UFI-Amia, incluso con la posibilidad de ataques contra su seguridad personal.
Uno de los abogados de la ex mandataria, Alejandro Rúa, reclamó este viernes al juez federal Sebastián Casanello fotocopias de todo el expediente 8912/10, en el que también es querellante el ex agente de inteligencia Antonio 'Jaime' Stiuso, éste último incluso pidió en 2014 la indagatoria de Bonadio, a quien acusaba de “encubrimiento y prevaricato” por una supuesta maniobra contra Nisman, orquestada –según la presentación- en connivencia con el ex comisario de la Policía Federal y titular de la Metropolitana Jorge “Fino” Palacios.
También la fiscal federal Paloma Ochoa pidió la indagatoria de Bonadio, aunque sujeta a la previa comprobación de una serie de circunstancias que le son imputadas en el expediente. La causa, a la que ayer aludió la ex mandataria a través de una serie de publicaciones en la red social Twitter, fue iniciada por Nisman en 2010 a partir de un anónimo que recibió.
Esa notificación sin firma le advertía sobre un supuesto acuerdo entre Bonadio y Palacios (por entonces detenido por la causa de las escuchas ilegales en el gobierno porteño) para apartar a Nisman de la causa AMIA.
El anónimo mencionaba una supuesta visita de Bonadio a Palacios a la cárcel, reuniones en las que se había hablado sobre amedrentamientos y ataques al fiscal y hasta el contacto con militantes de Quebracho para que concretaran la intimidación.
En 2014 Stiuso, estrecho colaborador de Nisman y querellante en la causa, denunció supuestas maniobras de Bonadio en una causa paralela a un expediente en el que investigaba el encubrimiento del atentado contra la AMIA, del que finalmente fue apartado por la Cámara Federal.
En ese momento, Stiuso argumentó que el magistrado había manipulado pruebas para desvincular a Palacios de la causa AMIA y forzar la salida de Nisman de la investigación. El expediente aún permanece abierto y en trámite de producción de prueba, aunque el ex espía dejó de impulsarla desde que el fiscal apareció muerto en su departamento de Le Parc en Puerto Madero, en enero de 2015.