La imputación por supuesto cobro de sobornos a narcotraficantes contra el juez federal de Orán, Raúl Reynoso, es motivo de especial preocupación en la Corte Suprema, explicaron fuentes cercanas al tribunal.
El magistrado salteño había sido designado como integrante de la flamante Comisión de Jueces Contra el Narcotráfico, creada hace apenas diez días, por impulso de su presidente, Ricardo Lorenzetti.
La situación de Reynoso ya está bajo análisis, indicaron las fuentes. Aclararon que, “como cualquier ciudadano, debe ser considerado inocente hasta que se demuestre lo contrario”, pero ya se están evaluando varias opciones. La primera opción es desvincularlo de la nueva comisión. En caso de que existan “semipruebas en su contra”, se explicó a este medio, deberá enfrentar un jury por mal desempeño.
El escándalo llega en mal momento, porque suma preocupaciones a un tribunal que también debe encarar el delicado tema del reemplazo de Eugenio Zaffaroni y de Carlos Fayt.
En los pasillos del cuarto piso del Palacio de Tribunales se compara a este caso con el del juez federal de Quilmes, Luis Armela. Al magistrado se le había delegado la tarea de controlar el cumplimiento de un fallo del máximo tribunal sobre la limpieza del Riachuelo. En un duro informe de noviembre de 2012 la Auditoría General de la Nación cuestionó su desempeño, al señalar “irregularidades” en las contrataciones de empresas vinculadas a familiares directos de Armella