El presidente
Néstor Kirchner quiere dejarle a su mujer, la candidata
Cristina Fernández, una
Casa Rosada a su medida: encargó una
serie de reformas y refacciones por las que el Estado nacional y el porteño
deberán desembolsar
más de 16 millones de pesos.
Uno de los contratistas que trabajan contrarreloj para finalizar la obra antes de fin de año
es
un primo hermano de Mauricio Macri,
Ángelo de Calcaterra. Su empresa, Calcaterra SA, se quedó en 2005 con la
licitación que convocó el ministro
Julio De Vido para acondicionar el histórico edificio.
Sólo para la “
restauración, pintura e iluminación de las fachadas de la Casa de Gobierno”,
la Dirección Nacional de Arquitectura presupuestó
4,7 millones de pesos.
Pero no sólo la fachada será remodelada; también el interior y al espacio verde que la
circunda. La idea del Presidente es que
Cristina tenga grandes jardines privados para que pueda pasear con sus invitados
en la más absoluta privacidad.