Por primera vez en tres décadas, el Ciclo Básico Común (CBC) de la Universidad de Buenos Aires ya no será ese lugar donde centenares de estudiantes desfilan por diversas sedes, con profesores que tienen que gritar para que se escuche lo que dicen y donde la fotocopia es el único modo de estudiar. La UBA estrenará este año nuevos contenidos en todas sus materias y ofrecerá a los estudiantes la posibilidad de cursar 21 asignaturas a distancia, a través del programa UBA XXI.
El Rectorado impulsa además por primera vez cursos específicos de capacitación para todos los profesores del CBC, a quienes les ofrece en forma gratuita acceso a herramientas tecnológicas que les permitan trabajar con simuladores y laboratorios online, de manera que puedan hacer sus clases más atractivas para las generaciones que hoy pueblan las aulas de la UBA.
“Los profesores del CBC están también estudiando sobre el aprendizaje del primer año en la universidad”, anuncia a PERFIL la secretaria académica de la UBA, María Catalina Nosiglia. “Se están poniendo en marcha 32 cursos virtuales de un mes, que hacen foco en el uso de imágenes y tecnología en la enseñanza”, agrega.
En la primera reunión del Consejo Superior de este año se aprobará un cambio total en los contenidos del CBC: en primer lugar, en Introducción al Pensamiento Científico y Sociedad y Estado, las dos materias comunes a todas las carreras de la UBA; y luego en el resto de las materias, arrancando por Algebra, Análisis Matemático y Física.
“Todo cambió desde 1985; la matemática se enseña diferente y ni hablar las ciencias sociales, se trata de actualizar contenidos”, dice Nosiglia, quien aclara que desde 1985, cuando se creó el CBC, nunca habían hecho una reforma curricular de esta magnitud. Sí se agregaron materias, e incluso peligró su futuro, como cuando se impuso el CPI en Medicina en la década del 90.
Hacia adelante. De a poco, casi todo el CBC se puede cursar por internet. Actualmente son 21 del total de las 25 materias las que pueden hacerse desde el campus de UBA XXI, sólo con exámenes presenciales. Camila Labbate tiene 21 años y estudia Historia. En 5º año hizo dos materias por UBA XXI: “Me resultó muy útil porque pude aprender a estudiar, usé las tutorías a full porque leía el material y no entendía nada”, dice. “Vamos hacia un modelo con una parte a distancia y otra presencial, que se adapta a la forma de relacionarse de las nuevas generaciones con el conocimiento”, asegura Nosiglia. “Y adelantamos el horario de finalización de las clases para que los chicos lleguen más temprano al tren o al colectivo, y además pensamos en lograr que se adapten al clima universitario y, en ese sentido, tratamos de que cursen el CBC en la misma sede en que funciona su facultad”, agrega.
Otra de las innovaciones en las cátedras del CBC es la inclusión de diversas herramientas tecnológicas. Para eso existe el Centro de Innovación en Tecnología Pedagógica (Citep), un espacio de vanguardia donde se pueden utilizar simuladores de toma de decisiones y un entorno para el desarrollo de problemas. También permite acceder a cursos y foros de debate gratis, y en su sede se pueden usar los laboratorios de tecnología (notebooks, iPads, máquinas de diseño, impresoras 3D) que las cátedras pueden reservar para dar alguna clase especial o trabajos con los estudiantes.
Ya hay 12 mil docentes de la UBA que se capacitaron en ese campus pedagógico. “La idea es extender cada vez más el acceso al CBC, con inscripción, materiales y cursadas intensivas en verano e invierno, todo online”, agrega Marina Lipsman, subsecretaria de Innovación y Calidad.
