La querella del juicio por abuso deshonesto y corrupción de menores que se sigue al cura Julio Grassi reclamó hoy que el sacerdote sea sometido a un examen físico para corroborar las señales en el cuerpo que describió una de sus supuestas víctimas, pero el acusado se negó una vez más a participar de cualquier eventual pericia que resulte "vejatoria".
Ahora, el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de Morón deberá resolver mañana si le ordena o no al acusado que se preste a ese examen para corroborar los dichos de "Luis", uno de los jóvenes abusados, que describió detalles de lunares y marcas del cuerpo del sacerdote.
Es que hoy, en medio de la audiencia, el abogado Juan Pablo Gallego, representante de todos los menores en nombre del Comité de Seguimiento de los Derechos del Niño (CASACIDN), le pidió al tribunal que ordene una pericia en el cuerpo de Grassi para evitar los más de 400 testigos que prevé el juicio.
"Pedimos una pericia para evaluar el cuerpo de Grassi que fue detallado de pies a cabeza por 'Luis'. Es un detalle central y podría generar una situación para Grassi si no se corroboran los dichos del menor. En vez de traer 500 testigos amigos o testigos, algunos falsos, que digan que estuvieron con Grassi tal o cual día, pedimos esta pericia, una prueba directa para saber si es culpable o no", afirmó Gallego ante los medios.
Sin embargo, la defensa se opuso a participar de esa clase de inspección sobre el acusado por considerarlo vejatorio y repitió que no participará de esa pericia, como tampoco se prestó a la pericia psicológica en la Justicia de Morón.
Según Gallego, "es claro que (Grassi) sistemáticamente se niega a ser peritado", porque, dijo, tanto él como sus abogados "saben que es culpable y quiere ganar tiempo".
El abogado Eduardo Calcagno, representante de "Luis", afirmó que le advirtió a la defensa que "si el tribunal lo ordena no puede oponerse porque la ley es para todos, vistan polleras, pantalones, uniformes o sotanas".
El abogado Sergio Piris, representante de "Gabriel", otro de los chicos denunciantes, opinó que "llama la atención que la defensa del imputado se oponga a esta prueba considerando que son vejatorias" las pericias solicitadas.
El Tribunal de Morón que comenzó el juicio hace más de un mes ya escuchó a Grassi y a los tres máximos testigos de cargo -"Luis, "Gabriel" y "Ezequiel"- los ex menores que lo denunciaron por 17 hechos considerados abuso deshonesto y corrupción de menores por los que el cura podría ser condenado a 25 años de cárcel.
"Gabriel" y "Ezequiel" contaron en el programa Telenoche Investiga en octubre de 2002 las acusaciones que más tarde llevaron a Grassi al banquillo, "Luis", en tanto, se sumó más tarde a las acusaciones. El joven que asistió a la Fundación Felices los Niños entre 1998 y 2003 ratificó ante los jueces 10 de los 17 presuntos hechos de abuso deshonesto y corrupción de menores que se le achacan al religioso.
Cuando el juicio ya estaba en marcha, "Luis" -que había sido señalado como una víctima de supuestos abusos del cura durante un viaje a la ciudad de El Calafate y que había negado esos hechos- se presentó en julio de 2006 en los tribunales de Morón para denunciar que los vejámenes los sufrió ya estando en Buenos Aires.
"Luis", que vivía en la fundación desde 1998, relató que formaba parte del circulo íntimo del cura y lo acompañaba a los canales de televisión y a las radios que visitaba el sacerdote en busca de la difusión de la obra.
También señaló que, tras el viaje a Calafate, Grassi se le habría acercado para mantener contactos físicos con él, que continuaron a lo largo del tiempo, e incluso dio detalles de lunares y marcas corporales del cura que ahora buscan ser verificadas en una pericia.