Contradiciendo una de las máximas del turismo sostenible, en Iguazú (Misiones) la ciudad de una de las maravillas más visitadas en el mundo, la falta de agua potable es una pesadilla para los lugareños.
Iguazú es una palabra guaraní que significa “aguas grandes”, aunque la ciudad está rodeada por dos ríos y varios arroyos, paradójicamente los vecinos sufren constantemente la falta de distribución de agua potable por intervalos que van de los dos hasta quince días dependiendo del barrio en que habiten.
El problema es estructural y de larga data, al ser una ciudad turística, por mucho tiempo la responsabilidad del desabastecimiento se volcó a la gran cantidad de hoteles y servicios gastronómicos que posee la ciudad, sin embargo durante la pandemia los problemas no cesaron y luego de una semana sin agua durante los primeros días de abril, los vecinos se cansaron y vienen desarrollando diferentes actividades de visibilización de la problemática y movilizaciones para lograr una solución estructural a la situación.
Ramona Romero, una de las organizadoras de la convocatoria definió a esta situación como “criminal” y explicó que: “decimos que es criminal la inacción de las autoridades porque estamos en un contexto de pandemia, no podemos no contar con agua, hay gente que ya se está enfermando, como es un recurso tan básico, parece superfluo ya, explicar nuestro padecimiento”.
Desde la empresa prestataria la respuesta a los vecinos fue el cierre de la oficina y la ausencia de las autoridades para brindar una respuesta. Solo elevaron un comunicado a través de los medios de comunicación en el que afirman que los problemas de abastecimiento se deben a una bajante brusca del Río Iguazú, un fenómeno totalmente previsible y repetitivo en esta época del año y al no poder culpabilizar al movimiento turístico, la inestabilidad del Río es la nueva respuesta ante cualquier pregunta.
Luego de no lograr ser recibidos por ningún funcionario, los manifestantes realizaron una asamblea donde decidieron comenzar una colecta de firmas en distintos puntos de la ciudad, solicitando la declaración de emergencia hídrica y la intervención del IMAS debido a la demostrada inoperancia ante la situación. Más de cuatro mil personas ya adhirieron a la propuesta dejando sus firmas, que también tiene su modalidad online a través de la plataforma Change.org donde superan los ocho mil firmantes.
Por otra parte, además de las movilizaciones, la semana pasada, desde la Asamblea de Vecinos Autoconvocados “El Agua es Vida” tomaron la decisión de solicitar “La banca ciudadana” en el Consejo Deliberante al no tener respuestas que garantice una solución de fondo al problema, por parte del municipio. "La banca Participación Ciudadana" es un mecanismo de participación destinado a recepcionar opiniones, reclamos y propuestas, en tanto el tema para exponer se encuentre en consonancia con lo atendible por el Concejo Deliberante" expresa la ordenanza municipal 13/2010.
“Esta es una herramienta que tienen los ciudadanos para exponer problemas y situaciones que nos atañen a todos los vecinos. Son tres los problemas que tenemos, uno es la toma de agua en el Río Iguazú, cuya conexión es precaria y ante la variación del Río Iguazú, queda desafectada, después la Planta Potabilizadora que no da abasto para toda la ciudad y por último las conexiones hacia los domicilios que son deficientes. Creemos que aproximadamente la mitad del agua que se distribuye, se pierde por las conexiones rotas y clandestinas” explicó Julio López, quien presentó la petición al Consejo.
Según explicó López, aguardan ser recibidos la semana que viene.
Por otra parte, el abogado y vecino de la ciudad, Gustavo Fernández, radicó este viernes una denuncia penal ante el Juzgado de Instrucción N° 3 de Puerto Iguazú contra el Instituto Misionero de Agua y Saneamiento por incumplimiento de deberes de funcionario público. En la misma, se solicita la realización de una investigación independiente para determinar las causas de los cortes y corroborar si se deben a las condiciones del Río Iguazú, donde se encuentra la toma que abastece la planta potabilizadora, o a la inoperancia o negligencia de la empresa.
Misiones: obras provinciales para solucionar la problemática
A modo paliativo y luego de hacerse eco de los reclamos de los ciudadanos, el gobernador de la provincia, Oscar Herrera Ahuad, entregó dos camiones hidrantes para distribución del agua que estarán a cargo del Municipio y del IMAS, también 1000 tanques de agua que serán distribuidos entre los barrios más afectados.
Por otra parte, se culminó la licitación de una toma de agua en el Arroyo Mboca-í, uno de los más caudalosos de la zona, cuya obra tiene prevista una duración de un año, y por otro lado un toma de agua del Río Paraná ubicada en el Barrio Santa Rosa, que abastecerá la nueva planta potabilizadora que se encuentra en el Barrio Las Leñas, ambos barrios que al estar en zonas altas y periféricas de la ciudad sufren constantemente la falta de presión de agua. Estas obras son esperadas hace más de ocho años por los vecinos. Según informó el primer mandatario provincial las mismas estarán culminadas para fines del año 2021 y principios del 2022. Mientras tanto, la ciudad de las “aguas grandes” debe seguir esperando.
(*) Desde Iguazú, Misiones.
