Tensión en Clorinda por un motín con rehenes

Un violento motín comenzó hoy a media mañana en la minialcaidía de Clorinda, a 200 kilómetros de la capital de Formosa y en el límite con Paraguay. La toma incluyó una fuga, un incendio, una toma de rehenes que aún permanece y heridos que fueron trasladados a centros asistenciales de la capital formoseña. Los amotinados pidieron garantías de que no habría represalias y ser trasladados a otras unidades penitenciarias.

El ministro de Gobierno, Jorge González, viajó hasta Clorinda y escuchó el reclamo de los internos, como también la fiscal de instrucción Gloria Rejala y autoridades policiales. Los reclusos habían iniciado una huelga de hambre hace quince días, en reclamo de mejores condiciones sanitarias y de alimentación. Hoy, al comenzar el incidente, algunos de ellos ganaron la calle, pero al poco tiempo fueron recapturados por la policía.

Los incidentes comenzaron a media mañana cuando unos veinte internos empezaron el reclamo por mejores condiciones sanitarias, con tal violencia que incendiaron las instalaciones, quemaron de colchones y rompieron tanques de agua desde la altura. Una vez que los policías y bomberos pudieron ingresar al penal, lograron evacuar a algunos de los internos heridos, y derivarlos al Hospital Central. Los hombres fueron trasladados en tres ambulancias del SIPEC y en una ambulancia del centro de salud de Nanawa (Paraguay).

Javier Gauna, periodista de Radio del Sol de Clorinda informó desde el lugar para Radio Uno Formosa y permitió escuchar el reclamo de los internos. “Estamos negociando con la fiscal y el ministro de Gobierno. Si nos dan garantías, desistimos de nuestra actitud, pero queremos evitar represalias y pedimos que nos trasladen a otras unidades policiales” señaló “Cheíto” uno de los reclusos en la emisora formoseña.

En contacto con el periodista Diego Madoery, Cheíto dijo que “hace quince días estamos en huelga todos los internos, por la comida que nos dan. También la policía se roba y se reparten las cosas que nos traen nuestros familiares. La comida no se puede comer, tiene remedios”, denunció. El amotinado agregó: “Hace un mes y medio que estoy alojado, pero voy al frente. El ministro está hablando con uno de nuestros compañeros, de acuerdo a la negociación, vamos a parar el motín. Si no tenemos un resultado, no paramos nada".

Informe: Carola Kelly, desde Formosa.