El jefe del fútbol paraguayo en la mira por audios con representantes

Una investigación del medio chileno CIPER reveló audios y mensajes de agentes con Robert Harrison, actual presidente de la Asociación Paraguaya de Fútbol, para convocar a jugadores a la Selección e inflar sus cotizaciones.

El presidente del fútbol paraguayo Foto: Cedoc

Los entramados de relaciones, negocios y presiones no son nuevas en el fútbol. Y ahora la mira se vuelve a posar en un país vecino ya que el protagonismo se lo lleva Robert Harrison, actual presidente de la Asociación Paraguaya de Fútbol. Una nueva filtración de audios y chats deja al descubierto una red de vínculos entre el dirigente paraguayo y representantes de futbolistas, con maniobras que apuntan a influir en convocatorias a la selección paraguaya, negociar transferencias de jugadores con beneficios personales e incluso el uso de estructuras offshore.

Una investigación del medio chileno CIPER da cuenta del material, que se remonta a distintos momentos de la gestión de Harrison, en los que habría influido en decisiones deportivas clave a través de su cercanía con agentes de futbolistas. En uno de los fragmentos más sensibles, se menciona cómo se habrían generado presiones para que ciertos jugadores, bajo representación de estos agentes, fueran incluidos en convocatorias a la selección paraguaya con el objetivo de aumentar su valor de mercado. También se detectaron maniobras que buscaban simular intereses de clubes extranjeros para inflar cotizaciones y así maximizar ganancias en futuras ventas.

El dirigente, que en la actualidad también ocupa un asiento en el Consejo de la FIFA y mantiene buena relación con figuras de peso en la Conmebol, habría seguido involucrado activamente con agentes futbolísticos que tenían intereses en el club Nacional del que fue directivo antes de ser presidente de la APF. CIPER tuvo acceso a mensajes intercambiados por Pedro Aldave (argentino) y Juan Appleyard, ambos agentes futbolísticos, Robert Harrison y Justo Villar, el exarquero y figura de Newell’s. Si bien parte del contenido de las conversaciones se habían difundido en el medio mexicano Récord en 2021 ahora trascendieron los audios y capturas de esos mensajes.

Uno de los episodios más llamativos tiene que ver con una supuesta operación para bloquear el pase de un jugador al fútbol europeo, ya que dicha transferencia no era favorable a los intereses de los allegados a Harrison. En los chats, se deja entrever una coordinación con terceros para "cortar" ese pase y redireccionarlo a un destino más conveniente para el grupo que manejaba los hilos detrás de escena.

El presidente de la APF, Harrison, en la presentación de Gustavo Alfaro como DT de la selección de ese país

Otro de los chats a los que accedió CIPER muestran que Aldave y Appleyard habrían abultado el precio del jugador Cristian Colman, de Nacional. Ante el interés de un club del exterior, Appleyard presentó una carta de oferta falsa a nombre del club Udinese por una oferta de 2 millones de euros. “¿Sabe que es trucha, Robert?”, preguntó Aldave a su socio de Playmaker el 13 de diciembre de 2016, refiriéndose al documento. Appleyard responde: “Mitad y mitad. Se la estoy diciendo que ‘sacaste’ del club, que es oficial, pero que es para hacerle correr a los otros boludos. Que el club hoy no está dispuesto, pero que vos estás haciendo un laburo para que el club en 15 días confirme, o en 10 días, confirme la oferta y se lleve al jugador”.

Otro punto relevante que plantea el informe de CIPER es el uso de estructuras financieras opacas. La investigación revela vínculos entre Harrison y sociedades offshore, algunas con sede en Panamá. Incluso, se hace mención a la compra de una aeronave que alguna vez perteneció a Nicolás Leoz, el expresidente paraguayo de la Conmebol involucrado en múltiples escándalos de corrupción durante el FIFAGate.

Los escándalos en  el fútbol no dejan de aparecer. En Argentina, Marcelo Moretti, presidente de San Lorenzo de Almagro, acaba de ser acusado de cobrar coimas para involucrar a un jugador al plantel de inferiores. El dirigente quedó grabado en una cámara oculta recibiendo dólares. "Es una donación", dijo al tratar de defenderse el dirigente que tenía poco más de un año en la conducción del club. 

El escándalo remite al  2015 cuando la FIFA  vivió su mayor crisis institucional tras un operativo conjunto entre el FBI y la justicia suiza que destapó una compleja red de corrupción que operaba desde hacía al menos dos décadas. Siete altos dirigentes del organismo fueron detenidos en un hotel de lujo en Zúrich, acusados de integrar una organización criminal que, mediante sobornos millonarios, favorecía a empresas en la adjudicación de derechos de transmisión, marketing y organización de competencias internacionales. En total, más de 40 personas y entidades fueron imputadas por la justicia estadounidense y provocó la renuncia del entonces presidente Joseph Blatter.