Robert Redford: qué fortuna dejó y quiénes serían sus herederos
El legendario actor que falleció a los 89 años supo aprovechar los crecientes ingresos por su estelar carrera como actor y director con inteligentes inversiones inmobiliarias
Robert Redford, el icónico actor y director de Hollywood que falleció este 16 de septiembre a los 89 años, no solo dejó una huella imborrable en la historia del cine, sino también un considerable patrimonio valorado en 200 millones de dólares según Celebrity Net Worth.
Su fortuna, construida a lo largo de una prolífica carrera, se compone de salarios millonarios, inteligentes inversiones inmobiliarias y el desarrollo de su proyecto más personal: el Sundance Mountain Resort.
La carrera de Redford fue un reflejo del ascenso de una estrella. En 1962, por su papel en "War Hunt", cobró apenas 500 dólares. Sin embargo, para 1968, su participación en "Butch Cassidy and the Sundance Kid" le reportó 750.000 dólares, un salario que no solo cambió su estatus financiero, sino que le permitió adquirir los terrenos que transformarían su vida.
De “Butch Cassidy” a Sundance: el legado eterno de Robert Redford
A partir de ahí, sus ingresos se dispararon: 500.000 dólares por "El Golpe" (1973), 2 millones por "Un Puente Lejano" (1977) y 3,5 millones por "El Jinete Eléctrico" (1979).
En la década de los 90, su caché seguía siendo estelar, ganando 4 millones por "Propuesta Indecente" (1993) y alcanzando un pico de 11 millones de dólares por "La Última Fortaleza" en 2001. A esto se suma la venta de su negocio de catálogo por correo en 2004, que le generó otros 40 millones de dólares.
Inversiones en bienes raíces
El corazón de su imperio inmobiliario fue, sin duda, el Sundance Mountain Resort en Utah. Lo que comenzó en 1961 con la compra de una pequeña cabaña por 500 dólares, se convirtió en una visión. En 1968, usó su salario de "Butch Cassidy" para comprar toda la ciudad de Timp Haven y protegerla de la especulación inmobiliaria.
Rebautizada como Sundance, se convirtió en un refugio para artistas y amantes de la naturaleza. En diciembre de 2020, Redford vendió el complejo de 2.600 acres a un grupo inversor por una suma no revelada, aunque su familia aún conserva una propiedad de 1.800 acres en la zona.
Más allá de Sundance, Redford demostró ser un hábil inversor en bienes raíces. En 1996 adquirió el "Rancho del Susurrador de Caballos" en Utah, puesto a la venta en 2021 por 4,6 millones de dólares. Su portafolio incluyó una propiedad frente al mar en Malibú vendida por 6 millones en 2001; un ático en Manhattan comprado por 3,7 millones en 1997 y vendido por 10 millones en 2002; y una finca vitivinícola en St. Helena, California, que vendió por 7 millones en 2019.
Su legado financiero es el testimonio de una carrera que supo combinar el arte con una astuta visión para los negocios. Su segunda esposa, Sibylle Szaggars, así como sus hijos Shauna, David y Amey serían sus beneficiarios.