Las acciones de Estados Unidos lograron un repunte de última hora y cerraron mayormente al alza por quinto día consecutivo, encabezadas por los sectores financiero y energético. El dólar se fortaleció luego de que los rendimientos de los bonos a 10 años del país superaran brevemente el 3%.
El S&P 500 y el Dow registraron cifras azules tras estar a la baja durante la mitad de la jornada, cuando Bloomberg News informó que el presidente Donald Trump ordenó a sus asesores proceder con la aplicación de aranceles a cerca de US$200.000 millones más en productos importados desde China. Los mercados financieros se vieron afectados esta semana por informes contradictorios sobre el estado de las relaciones comerciales entre las dos economías más grandes del mundo. El Nasdaq bajó, aunque a nivel semanal cerró al alza.
"Cuando llegan los titulares, la reacción instintiva en el mercado es vender o ganar inmediatamente", explicó por teléfono Quincy Krosby, estratega jefe de mercado de Prudential Financial. "El presidente ha sugerido en un par de tuits que no tiene prisa por llegar a un acuerdo, pero pese a esto, las conversaciones aparentemente se reanudarán y la pregunta será si eso lleva a más negociaciones".
La ofensiva ocurriría pese a los intentos del secretario del Tesoro de EE.UU. de reiniciar las conversaciones con Pekín para resolver la guerra comercial, según cuatro personas cercanas al asunto.
Las acciones también anotaron ascensos en Europa y Asia en medio del optimismo por las conversaciones entre EE.UU. y China y las medidas que tomaron Turquía y Rusia para respaldar sus monedas, que ayudaron a fomentar un ambiente positivo. Mineras y fabricantes de automóviles encabezaron el avance del Stoxx Europe 600, luego de una remontada de la mayoría de los indicadores asiáticos, que extendieron su mejora tras la peor racha de pérdidas en 16 años. El petróleo registró su tercer avance semanal consecutivo al tiempo que los operadores observan lo que sucede con el huracán Florence.
Desde el enfriamiento de la inflación en EE.UU. hasta las reuniones de los bancos centrales en Europa, Reino Unido, Turquía y Rusia, fue una semana agitada para los inversionistas. Las ventas de agosto de las minoristas estadounidenses revelaron que los hogares se tomaron un respiro en materia de gastos, aunque de todos modos los datos hablan de un fuerte mercado laboral y mayores salarios netos.