Los banqueros centrales estadounidenses consideraban que la pandemia de coronavirus representaba una grave amenaza para la economía cuando se reunieron el mes pasado y resolvieron desplegar todo su arsenal en su contra.
Las autoridades acordaron que el virus pesaría mucho en el corto plazo y “plantearon considerables riesgos a la baja para el panorama económico”, de acuerdo con las actas de la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto del 28 al 29 de abril publicadas el miércoles. “Los miembros acordaron que la Reserva Federal se comprometiera a utilizar toda su gama de herramientas para apoyar a la economía de Estados Unidos en este momento difícil”.
Los funcionarios de la Fed dejaron las tasas de interés cerca de cero cuando se reunieron a fines de abril. En su declaración posterior a la reunión, dijeron que la actual crisis de salud pública planteaba “riesgos considerables para las perspectivas económicas a mediano plazo”, minimizando la noción de que Estados Unidos podría esperar una recuperación rápida.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, también siguió la reunión con una sombría conferencia de prensa. Advirtió que la pandemia de coronavirus podría dejar cicatrices permanentes en la economía de EE.UU., a menos que los formuladores de política de todos los niveles hicieran más para limitar el daño.
Las actas refuerzan esa sombría evaluación.
Más de 36 millones de estadounidenses han perdido sus trabajos a medida que el contagio obliga a miles de empresas a cerrar sus puertas en todo el país. La actividad económica se desplomó un 4,8% anualizado en el primer trimestre. Los economistas han estimado que colapsará en un asombroso 34% en el segundo trimestre.
La Fed ha luchado por preparar una variedad de programas de préstamos de emergencia desde mediados de marzo, primero para sofocar un pánico en las ventas que se apoderó de los mercados monetarios a corto plazo, luego para movilizar créditos para hogares y empresas estadounidenses en dificultades, así como para gobiernos estatales y locales. Ha lanzado cinco programas hasta ahora. Cuatro más, incluida la línea de crédito Main Street de US$600.000 millones, están programados para comenzar a funcionar a finales de este mes.
La reunión del FOMC del 28 al 29 de abril se llevó a cabo por videoconferencia. Fue la primera sesión programada regularmente para el panel desde enero. La reunión prevista para el 17 y 18 de marzo se canceló después de que el comité sostuviera dos sesiones de emergencia los días 3 y 15 de marzo, en las que el FOMC redujo el rango objetivo para la tasa de interés de referencia de la Fed en un total de 1,5 puntos porcentuales. El rango permanece en cero a 0,25%.
