Mientras las redadas policiales en Deutsche Bank AG se extienden por segundo día, la investigación llegó al escalón más alto de la gerencia del banco.
Las oficinas de más de la mitad de la junta directiva, incluida la directora de regulaciones, Sylvie Matherat, fueron registradas, dijeron personas familiarizadas con el asunto, que pidieron no ser identificadas dado que el tema es privado. Un portavoz de Deutsche Bank declinó hacer comentarios.
El viernes, mientras las autoridades de fiscalización recorrían cinco oficinas de Deutsche Bank, el precio de las acciones cayó a otro mínimo récord e incluso cayeron momentáneamente por debajo del umbral de 8 euros (poco más de US$9), por primera vez en la historia.
Los últimos acontecimientos muestran que el máximo ejecutivo, Christian Sewing, el cuarto CEO del banco desde 2015, está atrapado en el mismo círculo de retroalimentación de noticias negativas, con el aumento de los costos de financiamiento y la disminución de los ingresos que frustraron a su predecesor, John Cryan.
Incluso después de meses de incansables viajes e interminables reuniones con el personal y clientes, el ejecutivo de 48 años del Deutsche Bank ha sido incapaz de romper con lo que el director de finanzas, James von Moltke, denominó un "círculo vicioso".
Sewing está haciendo todo lo posible para escapar de ese círculo. Ya ha reemplazado a dos miembros de la junta directiva, el ex director de operaciones Kim Hammonds y el jefe de administración de activos, Nicolas Moreau; la directora de regulaciones, Sylvie Matherat, puede ser la próxima en irse, han dicho personas familiarizadas con el tema.