La tasa de desempleo de Chile cayó más de lo esperado en el trimestre móvil hasta septiembre, pero por las razones equivocadas.
El desempleo bajó a un 7,1 por ciento desde un 7,3 por ciento durante el trimestre móvil al mes anterior, por debajo de la estimación media de un 7,2 por ciento de 17 analistas encuestados por Bloomberg. Sin embargo, no reflejó un repunte en las contrataciones.
El desempleo disminuyó después de que la fuerza laboral en su conjunto, incluidos los empleados y los desempleados, creciera al ritmo más lento en más de tres años. Será un golpe para el Banco Central de Chile, que a principios de este año se había referido al aumento de la fuerza laboral para explicar el alza en el desempleo. La entidad monetaria elevó la tasa de interés este mes, medida que algunos analistas han calificado de prematura.
Scotiabank pregunta en una nota sobre las cifras de desempleo si la gente se ha desanimado de buscar trabajo debido al debilitamiento del mercado laboral. La creación de empleos sigue siendo débil, y la desaceleración en el trabajo asalariado es un punto de especial preocupación en la industria de la construcción, escribieron los analistas Jorge Selaive, Waldo Riveras y Benjamín Sierra.
La fortaleza del mercado laboral parece estar en el sector estatal. El número de trabajadores públicos asalariados aumentó en 53.820 en septiembre con respecto a un año antes, en comparación con el alza de 49.320 en el sector privado, que es mucho más grande. Ese aumento se produce a pesar de las promesas de austeridad del nuevo gobierno del presidente Sebastián Piñera.