Boeing Co. ofrecerá compras voluntarias a todo su personal, conformado por 161.000 personas, en un intento por reducir costos y adaptarse a una crisis de coronavirus que podría deprimir el mercado de los fabricantes de aviones durante años.
“Cuando el mundo emerja de la pandemia, el tamaño del mercado de la aviación comercial y los tipos de productos y servicios que nuestros clientes desearán y necesitarán probablemente serán diferentes”, dijo el presidente ejecutivo, David Calhoun, en un mensaje a los empleados el jueves. “Es importante que comencemos a adaptarnos ahora a nuestra nueva realidad”.
La medida preservará el efectivo que tanto necesita Boeing, que enfrenta una fuerte contracción de la demanda al igual que su archirrival europeo Airbus SE. Clientes de aerolíneas de todo el mundo han cancelado sus viajes, y algunas aerolíneas tienen flotas enteras inmovilizadas, al tiempo que la pandemia de coronavirus acaba con los viajes. Alrededor de 44% de los aviones en todo el mundo están guardados, según una estimación de Cirium. A medida que los casos de coronavirus se acercan al millón en todo el mundo, no se sabe cuándo las aerolíneas retomarán sus itinerarios normales, y mucho menos cuándo comprarán aviones.
“Pese a lo difícil que será, Boeing necesita reducir personal”, dijo Nick Cunningham, analista de Agency Partners con sede en Londres, quien agregó que los salarios representan la mayor parte de los costos fijos de la compañía. “Si no lo hace, se destruirá la compañía”.
La opción de compra se ofrecerá a todos los empleados elegibles de Boeing, con sede en Chicago, que es el segundo mayor contratista de defensa de Estados Unidos y uno de sus mayores exportadores. La compañía proporcionará información sobre los términos de la oferta dentro de cuatro semanas.
“Esta medida apunta a reducir la necesidad de tomar otras acciones respecto de la fuerza laboral”, dijo Calhoun.
Las acciones de Boeing subieron cerca de 2,5% en las cotizaciones previas a la aperutra del mercado en Nueva York. Las acciones registran pérdidas de 60% en lo que va del año.
Crisis gemelas
Cuando estalló la pandemia de coronavirus, Boeing ya experimentaba dificultades debido a que su 737 Max había estado en tierra un perído prolongado y se le habían agotado sus ingresos y flujo de efectivo. La enfermedad ha ralentizado los trabajos para volver a certificar su caballito de batalla de pasillo único, mientras ensombrece las perspectivas de ventas una vez que vuelva al mercado.
La compañía también enfrenta una caída en la demanda de aviones de doble pasillo como su 787 Dreamliner y el próximo 777X, ya que los viajes de larga distancia se han visto más afectados que los cortos. La producción de aviones de fuselaje ancho podría caer un 60% en los próximos tres años, indicó la analista de Jefferies, Sheila Kahyaoglu, en un informe del 31 de marzo.
La necesidad de reducir gastos es un dilema para el director ejecutivo Calhoun. Los despidos forzados le darían a Boeing más control sobre dónde y cómo reducir costos. Pero seguramente provocarían una reacción violenta que podría complicar cualquier esfuerzo del fabricante para acceder a la ayuda del Gobierno.
Si bien la compañía le dijo al Congreso que la industria necesita unos US$60.000 millones, Calhoun teme ante las condiciones que podrían venir asociadas y dijo a Fox News que la compañía tiene “otras opciones”.
Las compras voluntarias mantienen viable la opción de rescate del Gobierno, en caso de que Calhoun finalmente elija esa opción. Boeing está estudiando las opciones de financiamiento disponibles, informaron personas familiarizadas con su análisis de la semana pasada.
En caso de reducir personal, otro desafío para Boeing será mantener las competencias esenciales que serán necesarias cuando el mercado se recupere, dijo Cunningham.