Ecuador dijo el miércoles que quiere posponer los pagos de casi US$17.000 millones de deuda, lo que dejó nuevamente a sus bonos en caída libre.
Los bonos de referencia de la nación con vencimiento en 2028 cayeron 1,6 centavos a 27,8 centavos por dólar, la mayor caída en dos semanas.
El Gobierno necesitará el consentimiento de los tenedores de bonos que posean al menos entre 50% y 75% de la deuda, dependiendo del título, para posponer los pagos de intereses hasta mediados de agosto, liberando así cerca de US$811 millones para hacer frente a la pandemia de coronavirus. El Covid-19 ha golpeado fuertemente al país, especialmente en la ciudad portuaria de Guayaquil, ya que simultáneamente una caída en los precios del petróleo ha reducido los ingresos.
El Gobierno tiene hasta las 5 p.m., hora de Nueva York, el 17 de abril para llegar a un acuerdo con los bonistas, según un comunicado del Ministerio de Economía y Finanzas, o se corre el riesgo de caer en incumplimiento. El Gobierno del presidente Lenín Moreno continúa trabajando con el Fondo Monetario Internacional para reducir su deuda a un nivel sostenible, dijo.
El país ya había dicho que agotaría el período de gracia de los bonos antes de hacer los pagos de intereses.
Para empeorar los problemas de Ecuador, un deslizamiento de tierra el 7 de abril rompió los dos oleoductos del país, poniendo en riesgo las exportaciones de petróleo.
Ecuador, que el 23 de marzo pasado reembolsó apenas su segundo bono en su historia, no tiene pagos de capital pendientes hasta 2022.