El Gobierno chino ha autorizado el acceso del fabricante español de componentes para automóviles Gestamp Automoción SA a su planta en Wuhan, la cual tuvo que cerrarse debido al brote de coronavirus que comenzó en la ciudad de la provincia de Hubei.
El presidente de Gestamp, Francisco Riberas, dijo en una entrevista en Madrid que habían recibido un permiso parcial, principalmente para mover las existencias. Hasta hace poco, la compañía no tenía acceso a la planta, ni siquiera para transportar parte de la producción almacenada.
Las 11 plantas de la compañía en China han reanudado gradualmente sus operaciones en las últimas semanas. La fábrica en Wuhan, la ciudad en el epicentro del brote de virus que ha infectado a unas 93.000 personas en todo el mundo, era la única que aún no había reanudado las operaciones.
Los ingresos de Gestamp en China en 2019 ascendieron a 847 millones de euros (US$941 millones), el 9% de las ventas totales, dijo la compañía con sede en Madrid en un comunicado sobre beneficios la semana pasada. La planta de Wuhan representa menos del 5% de los ingresos de la firma en el país, señaló Riberas.