El encarcelado expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, podría hacer que su heredero natural sea competitivo, pero no un ganador seguro en las disputadas elecciones generales de octubre, según una encuesta de opinión que se dio a conocer el jueves.
Con el apoyo de Lula, el exalcalde de Sao Paulo Fernando Haddad tendría un ocho por ciento de votos “con seguridad”, dentro del margen de error de otros cinco candidatos presidenciales, según la encuesta publicada por Poder360, un sitio web de noticias políticas.
El 26 por ciento de los encuestados dijo que "podría votar" por Haddad si es respaldado por el enormemente popular líder izquierdista.
Lula está cumpliendo una sentencia de prisión de más de 12 años por cargos de corrupción y lavado de dinero, y se espera que en los próximos días sea inhabilitado para participar en la carrera presidencial. Haddad es el actual compañero de fórmula de Lula y tomaría su lugar.
Después de un masivo escándalo de corrupción y la peor recesión en la historia del país, la apatía de los votantes es alta. Los activos nacionales cayeron este mes ya que los inversionistas han asumido la posibilidad de que un candidato hostil al mercado gane las elecciones. No obstante, el comienzo de la propaganda televisiva gratuita este viernes marca una etapa crucial que podría influir en la carrera altamente disputada. Por ley, las empresas encuestadoras deben realizar sus sondeos con los candidatos oficiales actuales, incluido Lula. Poder360 no consideró un escenario sin él, ni uno con una posible segunda vuelta, que está programada para el 28 de octubre.
Según una encuesta de Datafolha publicada el 22 de agosto, el excapitán del Ejército Jair Bolsonaro perdería en segunda vuelta frente a todos los principales candidatos, a excepción de Haddad, cuyo Partido de los Trabajadores estuvo en el poder desde 2003 hasta 2016, cuando fue destituida la sucesora de Lula, Dilma Rousseff.
El Partido de los Trabajadores propone revivir los bancos estatales y ofrecer préstamos más baratos, el tipo de políticas que conducen a un alto endeudamiento y un déficit cada vez mayor. También quiere introducir controles de capital para reducir las fluctuaciones de divisas.
En la encuesta de Poder360 publicada el jueves, Lula tiene un 30 por ciento de apoyo, seguido de Bolsonaro con un 21 por ciento. El exgobernador del estado de Ceará Ciro Gomes y el exgobernador del estado de Sao Paulo Geraldo Alckmin obtuvieron el 7 por ciento cada uno.
Un total de 5.500 personas fueron encuestadas entre el 24 de agosto y el 27 de agosto. El sondeo tiene un margen de error de más o menos 2 puntos porcentuales.
