Las monedas de los mercados emergentes borraron sus ganancias de 2019 y las acciones están a punto de seguir su ejemplo, a medida que los inversionistas se deshacen de los activos más riesgosos en medio de una nueva escalada en la tensión comercial.
El indicador de divisas de MSCI ha caído 0,5% este año, revirtiendo ganancias anuales de hasta 2,2% hace solo una semana. El índice bursátil se aferra a una ganancia de menos de 0,4%. Incluso durante lo peor de una venta masiva de mayo, las acciones habían mantenido una ganancia de 2% en el año.
Solo cuatro de las 24 monedas de los países en desarrollo se mantienen, en comparación con las 11 del martes pasado, antes de que la Reserva Federal redujera las tasas por primera vez en más de una década. Siete índices bursátiles de referencia han bajado, en comparación con cuatro hace dos semanas, después de que Corea del Sur, Polonia e Indonesia pasaran de verde a rojo.
El atractivo de los activos de riesgo se desvaneció después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara nuevos aranceles, y las autoridades chinas permitieran que el yuan superara el nivel psicológico clave de 7 por dólar. El mensaje agresivo de la Reserva Federal al reducir los costos de los préstamos también pesó sobre el sentimiento.
Con pocas perspectivas de una solución rápida a la disputa comercial, inversionistas y analistas dicen que un repunte en los activos de los mercados emergentes no es probable en el corto plazo. Los estrategas de Morgan Stanley, que eliminaron un llamado alcista para las monedas de los mercados emergentes después de la decisión de la Fed, ahora recomiendan que los clientes se mantengan a la defensiva, mientras que Citigroup dice que es hora de reducir las apuestas riesgosas en los países en desarrollo. Société Génerale describe el movimiento actual como una "fase de caída".
"Los desarrollos en lo que va de la semana se han sumado a nuestra convicción de que los inversionistas buscarán reducir el riesgo de sus carteras", escribieron estrategas de Morgan Stanley liderados por James Lord en una nota el martes. "La aversión al riesgo se movió a los extremos; sin embargo, recomendaríamos desvanecer cualquier rebote en los activos de riesgo, ya que es poco probable que el crecimiento global y las preocupaciones comerciales mejoren pronto".
Para Per Hammarlund, estratega jefe de mercados emergentes de SEB AB en Estocolmo, la escalada de la tensión comercial marca un "fuerte deterioro" en las perspectivas para los mercados emergentes. Dice que el peso mexicano, el real brasileño, la lira turca y el rand sudafricano se encuentran entre las monedas más vulnerables.
"La reacción del mercado probablemente será un periodo prolongado de debilidad, tanto en las monedas como en las acciones de los mercados emergentes, a medida que los inversionistas se ajusten a un menor PIB y proyecciones de crecimiento de las ganancias más bajas", dice Hammarlund.