Parece que ya no importa si las bolsas mundiales suben o bajan: los inversores siguen apostando por el oro.
Las participaciones en fondos negociados en bolsa (ETF, de sus siglas en inglés) respaldados por oro aumentaron en 55 toneladas durante los tres últimos días, lo que representa casi una tercera parte de las entradas en lo que va de año, según un recuento preliminar de Bloomberg. Como valor refugio, la demanda de oro tiende a moverse en la dirección opuesta a la de los mercados bursátiles. Sin embargo, las compras de ETF de esta semana continuaban el martes incluso cuando las acciones repuntaban tras la caída del lunes.
“El oro continúa proporcionando una red de seguridad ante la caída de los mercados financieros”, dijo Stephen Innes, estratega jefe de mercados de Asia de AxiCorp Ltd. en un comentario. “Uno se siente muy cómodo con participaciones en oro en este entorno”.
El oro al contado subía el miércoles conforme los futuros de acciones estadounidenses caían y el dólar se debilitaba después de que la Administración no ofreciera detalles sobre un paquete de estímulo para combatir el impacto económico de la crisis del coronavirus.
Un recorte de la tasa de interés de emergencia por parte del Banco de Inglaterra también sumó apoyo al metal amarillo, mientras que Italia planea gastar 25.000 millones de euros (US$28.300 millones) en medidas para ayudar a combatir los efectos económicos de la epidemia.
Las participaciones en ETF respaldados por oro subieron 170,5 toneladas este año hasta el martes, según los datos más recientes. Las compras están aumentando por los temores a una recesión debido al brote de coronavirus y una creciente ola de relajación monetaria.
El oro al contado subía un 1% a US$1.665,67 la onza a las 11:05 a.m. en Londres. La plata y el platino al contado también avanzaron, mientras que el paladio caía por tercer día.
La atención de los inversores ahora gira hacia el Banco Central Europeo y la reunión sobre política monetaria mañana, con la advertencia de la presidenta Christine Lagarde de un choque económico a menos que los líderes actúen con urgencia. La Reserva Federal se reúne la próxima semana y también se anticipa una reducción de las tasas, lo que refuerza aún más el atractivo del oro.
No obstante, el metal amarillo podría hacer frente a más vientos en su trayectoria alcista, dado que la volatilidad de los precios del metal y los rangos medios de negociación siguen siendo elevados, dijo Ole Hansen, responsable de estrategia de materias primas de Saxo Bank A/S.
“Para que vuelva a tocar y supere los US$1.700, probablemente necesitaremos ver una escalada estilo europeo del peligro del virus en Estados Unidos”, dijo Hansen.