JPMorgan Chase & Co. presionó a un corredor bursátil que padecía depresión para que renunciara y lo despidió cuando se negó, manifestó la firma encargada del patrimonio del agente de bolsa a una corte federal de apelaciones de Nueva York, en una demanda por muerte injusta contra la compañía.El administrador del patrimonio quiere responsabilizar a JPMorgan por el suicidio de Michael Lorig que, según el representante, fue impulsado por el trato de la compañía a Lorig durante su lucha contra la depresión y la ansiedad.
JPMorgan ganó a nivel de corte de distrito, cuando un juez federal sostuvo que las supuestas irregularidades de la compañía eran "simplemente demasiado débiles" para ser la causa de la muerte de Lorig.
Aun así, el representante del patrimonio de Lorig se comunicó con el Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito de EE.UU. por medio de un informe del 7 de junio. La compañía tenía un amplio conocimiento de los problemas de salud mental de Lorig, incluidas sus ideas suicidas, dijo el encargado. Sin embargo, la empresa rescindió sus licencias comerciales y lo despidió cuando se negó a aceptar un paquete de jubilación "altamente desfavorable", agregó.
Lorig se unió a JPMorgan en 2008 como director gerente senior luego de su fusión con Bear Stearns. Su depresión y ansiedad lo llevaron a tomar varios permisos de ausencia prolongados, y fue durante su último permiso de ausencia en 2016 que JPMorgan le habría solicitado que se retirara. Cuando se negó, se le habría dicho a Lorig que no podía regresar al trabajo y le informaron que sus licencias profesionales habían sido canceladas. Lorig se quitó la vida en 2017, a los 66 años.
En un expediente judicial anterior, JPMorgan calificó la muerte de Lorig como "sin lugar a dudas, una tragedia". Pero negó cualquier vínculo causal entre su presunta conducta y el suicidio, al señalar que Lorig murió 75 días después de su última interacción con JPMorgan.