El primer ministro de Quebec, François Legault, instó a los trabajadores del sector de la salud que no han estado trabajando a que regresen y ayuden a paliar un déficit en la dotación de personal que ha llegado a 9.500 empleados durante la pandemia.
Mientras que 4.000 trabajadores están contagiados, otros 5.500 no se presentan a trabajar por otras razones, como el miedo a enfermarse, dijo el jueves Legault durante una conferencia de prensa. La cifra sumó otros 800 durante la noche.
“En una red que enfrenta una situación que es más difícil de lo habitual, 9.500 es muchísimo”, dijo. “Quiero hacer un llamado a las personas que están en casa, que en algunos casos están completando una cuarentena de 14 días tras haberse contagiado: los necesitamos”.
La provincia francoparlante ha sido la más afectada por la pandemia, ya que reporta más de la mitad de los casos y muertes confirmados de todo Canadá. Al no poder contar con suficiente personal, Legault solicitó el miércoles al Gobierno Federal que dispusiera a 1.000 soldados en centros de atención a largo plazo, donde cientos de personas mayores han muerto. El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, accedió a la solicitud.
Cuando se le preguntó sobre la información en los medios locales sobre que los trabajadores no están recibiendo el equipamiento que necesitan y utilizan insumos improvisados, Legault trató de calmar sus temores.
“Tenemos todo el equipamiento de protección personal y estamos enviando directrices claras para no correr riesgos para su seguridad”, señaló.