La compañía que le trajo el chocolate con leche, los fideos instantáneos Maggi y el helado Rocky Road está preocupado por su salud.
Nestlé SA, la mayor empresa de alimentos del mundo, se ha unido a la tendencia de la nutrición personalizada, con una mezcla de inteligencia artificial, pruebas genéticas y la obsesión de publicar fotos de comida en Instagram. El programa, que comenzó en Japón, un país con una población cada vez más longeva, podría dar acceso a gran cantidad de datos sobre consumidores, interesados en mejorar su salud, a la empresa suiza.
En Japón, unos 100.000 usuarios del programa “Embajador de Bienestar Nestlé” envían fotos de su comida a través de la popular aplicación Line, para obtener recomendaciones sobre cambios en estilo de vida y suplementos especialmente formulados para ellos. El programa puede costar US$600 anuales por cápsulas para preparar té y batidos ricos en nutrientes, así como otros productos como aperitivos con vitaminas. Un equipo casero para entregar pruebas de sangre y tests de ADN ayuda a identificar la susceptibilidad a problemas comunes, como colesterol y diabetes.
“Gran parte del enfoque personalizado es liderado por empresas más pequeñas, por eso es hasta ahora bastante limitado”, dijo Ray Fujii, socio de L.E.K. Consulting en Japón.
“Nestlé está dando un paso más allá. Están tratando de encontrar un algoritmo entre los resultados de los tests y la información genética y lo que ofrecen como solución. Si logran hacerlo, será un gran paso”.
De bocadillos a suplementos
El programa de Nestlé es parte de los cambios en dirección que ha emprendido la empresa fundada hace 152 años, que vendió su unidad de dulces en Estados Unidos este año, en medio de la caída de la demanda por productos azucarados. Por el contrario, la empresa ha emprendido una serie de inversiones en opciones más saludables, incluido el fabricante de comidas vegetarianas Sweet Earth Foods y el servicio de reparto de alimentos a domicilio Freshly. La empresa compró el fabricante canadiense de suplementos dietéticos Atrium Innovations en marzo por US$2.300 millones, en su mayor adquisición en el área de nutrición médica en más de una década.
“Los problemas de salud asociados con la alimentación se han convertido en un gran tema”, dijo Kozo Takaoka, quien dirige el negocio de la empresa en Japón, en una entrevista en Tokio. “Nestlé debe responder a nivel mundial y convertirlo en nuestra misión para el siglo XXI”. Además, afirmó que el segmento de bienestar podría eventualmente representar la mitad de las ventas de Nestlé en Japón.
Algunos nutricionistas se muestran escépticos a que planes de dieta personalizados, que giran alrededor de suplementos, sean algo útil y creen que su efecto podría ser más psicológico que médico.
“El programa de Nestlé está diseñado para personalizar dietas de formas que probablemente no son necesarias”, dijo Marion Nestle, profesora de nutrición en la Universidad de Nueva York, quien no está vinculado al fabricante de chocolates KitKat. “Si creo que algo es más saludable, lo más probable es que me sienta mejor”.