Las políticas energéticas y climáticas en dos amplias leyes que avanzan en el Congreso de Estados Unidos pondrían al alcance de los objetivos ambientales del presidente Joe Biden para lograr un 80% de energía limpia y una reducción del 50% de emisiones de carbono en toda la economía para 2030, según un análisis de los demócratas del Senado.
En una carta a sus colegas, el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, dijo que la legislación, si se promulga, representaría la inversión más significativa en la lucha contra el cambio climático en la historia, y señaló que viene inmediatamente después de un nefasto informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) que descubrió que los peores efectos del cambio climático no se evitarán a menos que se tomen medidas drásticas para eliminar la contaminación por gases de efecto invernadero.
“La conclusión es la siguiente: tenemos muy poco tiempo para evitar los resultados más horrendos para nuestros hijos y nietos”, escribió Schumer en la carta. “Pero si actuamos ahora y con valentía, podemos mitigar los peores efectos del cambio climático y ser dueños de la economía de energía limpia del siglo XXI”.
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Las iniciativas climáticas y energéticas están contenidas en el proyecto de ley de infraestructura y las instrucciones de la resolución presupuestaria, que se promulgarán en una legislación separada en los próximos meses.
Según el análisis, dos programas propuestos en el anteproyecto de presupuesto del Senado —un Programa de Pago de Electricidad Limpia diseñado para obligar a las empresas de servicios públicos a producir electricidad utilizando fuentes energéticas libres de emisiones y un paquete de incentivos fiscales diseñado para fomentar la adopción de energía más limpia y vehículos sin emisiones— lograrían dos tercios de las reducciones de emisiones en la resolución presupuestaria y la Ley de Empleo e Inversión en Infraestructura combinadas.
A principios de este mes, el Senado aprobó un marco presupuestario de US$3.500 millones que prepara el escenario para una avalancha de gastos en iniciativas de energía limpia destinadas a ayudar a combatir el cambio climático y alejar a EE.UU. de los combustibles fósiles, y también aprobó un proyecto de ley de infraestructura de US$550.000 millones que incluía miles de millones en financiación para energía limpia.
La Cámara de Representantes de EE.UU. acogió el martes el marco presupuestario y la presidenta, Nancy Pelosi, se comprometió a votar sobre el proyecto de ley de infraestructura antes del 27 de septiembre.
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