La era del café caro no terminará pronto, a juzgar por las cantidades cada vez menores que se mantienen en reservas.
Las existencias de granos arábica de alta gama, un favorito de las cafeterías artesanales y cadenas como Starbucks Corp., totalizaron 1.078 millones de sacos o alrededor de 65 millones de kilos, según datos publicados el lunes por la bolsa estadounidense ICE Futures. Es el nivel más bajo desde febrero de 2000.
Las reservas de café vienen cayendo desde septiembre debido al aumento de los costos de envío y al clima desfavorable que redujo la producción en Brasil, el mayor productor y exportador del mundo.
La reducción de los inventarios es preocupante porque los países acudirán a las reservas cuando no reciban suficiente producto del exterior. Es una señal de que la demanda está superando la oferta y una condición para el aumento de los precios. Los precios del café ya vienen tocando máximos de varios años en un momento en que la inflación de los alimentos se hace sentir en el mundo.
“Las acciones bajas en bolsa son uno de los factores alcistas que se suman al repunte del café”, dijo Fernando Maximiliano, analista de StoneX en São Paulo, Brasil.
En este momento, es más atractivo para los productores brasileños vender en los mercados nacionales en lugar de pagar altos costos de envío para exportar, según Maximiliano.