El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo que tiene una hernia en el abdomen que requerirá exámenes médicos adicionales, lo que pone su salud en el centro de atención solo unos días después de sufrir una caída y una pérdida temporal de memoria.
La hernia se ubica cerca de la herida que le provocó la puñalada recibida mientras se encontraba en la campaña electoral en 2018, dijo Bolsonaro a la prensa el jueves por la noche. Agregó que los exámenes se realizarán después de que regrese de los próximos viajes al Foro Económico Mundial, que se realizará en Davos y, posteriormente, a la India.
La oficina de prensa de Bolsonaro confirmó que el presidente se someterá en febrero a un chequeo general de salud, pero no dio detalles. El viernes, cuando la prensa le preguntó en Brasilia sobre su hernia, el presidente respondió que tenía “un problema de salud llamado edad” y no entregó más información.
Bolsonaro, de 64 años, se ha visto afectado por una serie de problemas de salud desde que lo apuñalaron. Ha sido hospitalizado en varias oportunidades producto de ese ataque. Por otra parte, en diciembre, fue trasladado de urgencia al hospital después de caer en el baño del palacio presidencial y perder temporalmente la memoria. El presidente fue dado de alta después de que un escáner cerebral mostrara que no tenía problemas de salud.
Los médicos también descartaron un cáncer de piel después de que Bolsonaro se sometiera a una evaluación dermatológica el mes pasado.