El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, emitió una orden en virtud de la Ley de Producción de Defensa para acelerar la producción de ventiladores luego de que funcionarios estatales informaran que los suministros con los que cuentan no son adecuados para los pacientes con coronavirus.
Trump firmó una orden ejecutiva el jueves que ordena al Departamento de Salud y Servicios Humanos garantizar que General Electric Co., Hill-Rom Holdings Inc., Medtronic Plc, ResMed Inc., Royal Philips NV y Vyaire Medical Inc. cuenten con los suministros necesarios. La orden ejecutiva no nombra a los proveedores de las empresas que fabrican ventiladores.
Trump dijo en un comunicado que la orden “garantizaría más plenamente que los fabricantes nacionales puedan producir los ventiladores necesarios para salvar vidas estadounidenses”.
El presidente enfrenta una presión cada vez mayor por parte de los gobernadores y demócratas del Congreso para que utilice la ley de defensa que se usó en la Guerra de Corea, la que les otorga poderes amplios para obligar a las empresas a producir los equipos de protección personal y ventiladores que escasean. Más de 236.000 personas en EE.UU. han contraído el virus y más de 5.600 han fallecido, según cifras de la Universidad Johns Hopkins.
Funcionarios de salud y gobernadores han señalado que en algunas localidades podrían morir personas debido a que no habrán suficientes ventiladores para el creciente número de pacientes que los necesitan.
Trump expresó renuencia a invocar la ley al compararla con la nacionalización de las industrias, y dijo que prefiere amenazar con el uso de la ley para obligar a las empresas a cumplir con las demandas de fabricación de equipos.
Sin embargo, el viernes pasado el presidente ordenó al secretario de Salud de EE.UU., bajo la ley de defensa, que exigiera fabricar ventiladores a General Motors Co.