Una nueva investigación norteamericana reveló lo que ya muchos sospechaban, que el hombre es un animal de costumbres, que repite movimientos en su vida cotidiana.
Investigadores de la Northeastern University de Boston realizaron un estudio basado en los usos de los teléfonos celulares de 100 mil personas. Los movimientos revelaron que la mayoría se deja llevar por las costumbres.
El equipo investigador, liderado por Albert-László Barabási, explica que los hombres siguen la pauta de comportamiento del típico empleado que viaja de casa al trabajo y del trabajo a casa, según publica la revista científica británica Nature.
La conclusión del trabajo es que las trayectorias del ser humano son "simples y reproducibles", muestran un "alto grado de regularidad espacial y temporal" y se limitan a un abanico de entre 5 y 50 lugares.
Los investigadores explican que este estudio permitirá a los científicos comprender el comportamiento de los individuos más allá de establecer un mapa preciso de sus movimientos.
Sospechan que estas revelaciones pueden ayudar a establecer una mejor planificación urbanística y del tráfico, a estudiar las respuestas más eficaces ante una emergencia e, incluso, a prevenir las epidemias.