CIENCIA
cumbre del clima de la ONU

Habría más tifones si los países no reducen la emisión de gases

Debate. La catástrofe de Filipinas en la apertura de la COP 19.
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Agencias
La Unión Europea y los pequeños estados insulares lamentaron la decisión de Japón de revisar drásticamente a la baja su objetivo de reducir los gases de efecto invernadero debido a la parada de los reactores nucleares tras el accidente de Fukushima. La Unión Europea emitió un comunicado en Varsovia, donde se realiza desde el lunes la Cumbre Mundial sobre Cambio Climático (COP19), en el que insta a Japón a que tenga en cuenta las consecuencias de esta decisión mientras que la Alianza de Pequeños Estados Insulares (Aosis) denunció un “enorme paso atrás”.
El gobierno japonés ha abandonado su anterior objetivo de reducción de gases de efecto invernadero en 25% entre 1990 y 2020 para dejarlo en “3,8% entre 2005 y 2020”. Dicho objetivo fue fijado basándose en la hipótesis de que Japón estaría sin energía nuclear durante ese periodo.
La UE “reconoció” las dificultades que tiene Japón tras el terremoto y el tsunami de marzo de 2011 y sus repercusiones en el sector nuclear.Pero, aunque “comprendan” la situación, los europeos esperan que “todos los países cumplan sus compromisos de reducción, y que los países desarrollados en particular sigan mostrando el liderazgo en la materia”, según el comunicado de la Comisión Europea.
La Aosis, que agrupa a las naciones más vulnerables ante la subida del nivel del agua, acusó a Japón de dar marcha atrás en sus promesas realizadas en la Cumbre de Copenhague en 2009. El tifón Haiyan, que ha destrozado Filipinas, sólo “es la última de una serie de catástrofes metereológicas vinculadas con el clima”, dice Aosis en un comunicado.
“A menos que la comunidad internacional trabaje junta para reducir de manera urgente las emisiones de gas de efecto invernadero, sabemos que a la vuelta de la esquina espera otros tifones como Haiyan”, alertaron.
La XIX conferencia sobre el clima de Naciones Unidas dio inicio este lunes en Varsovia para preparar un acuerdo global que se espera aprobar y firmar en 2015 en París sobre la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. La Cumbre comenzó en medio de las repercusiones por el tifón Haiyán. El delegado de Filipinas en la COP 19, Naderev Saño, estalló en lágrimas al subir a la tribuna. Y anunció que se declaraba en huelga de hambre hasta el 22 de noviembre para obtener avances en la lucha contra el cambio climático. “En solidaridad con mis compatriotas, que luchan para encontrar alimentos, voy a comenzar un ayuno voluntario por el clima”, declaró.