¿Cómo actúan los padres frente al uso de internet en los hogares? ¿Cómo perciben el vínculo de sus hijos con la tecnología y cómo afecta esto a los niños? Estas son algunas de las preguntas en las que indagó el estudio “Chicos y adultos online: nuevos desafíos para la crianza”, que realizó la Asociación Civil Chicos.net con el apoyo de Disney y Fibertel.
Según el informe, el 82% de los padres argentinos están preocupados porque sus hijos sean abordados por un adulto que los ponga en peligro. Ante esta situación, la mayoría se siente responsable por alertarlos sobre los potenciales riesgos de internet (76%). Sin embargo, en lugar de acompañarlos para que construyan criterios de protección propios, suelen controlarlos a través de diferentes mecanismos de poder, como prohibirles el acceso a dispositivos o “espiar” su muro de Facebook.
Del estudio, que será presentado el próximo martes con motivo del Día Internacional de Internet Segura, participaron más de 1.200 padres y niños de entre 4 y 12 años de Argentina, Brasil y México. Además de encuestas online, se realizaron diferentes grupos focales que permitieron identificar cuatro maneras en que los padres se involucran con el uso que sus hijos hacen de la tecnología.
El trabajo mostró que en la Argentina predomina el perfil de padre “guardaespaldas” (37%). Estos buscan fomentar una relación de amistad con sus hijos. A la hora de ejercer algún tipo de control en el uso de los dispositivos, las reglas son tímidas más por no generar roces con los hijos que por no acosar. “El problema es que los adultos se ven a ellos mismos como adolescentes y, al no haber esa diferenciación entre adultos y chicos, falta el rol de autoridad. Al no darles la responsabilidad suficiente para que los chicos construyan pautas de autocuidado, ellos van a ser más inseguros en sus conductas”, explicó Marcela Czarny, presidenta de la Asociación Civil Chicos.net.
Conviven con este perfil, tres más: el padre “espía” (18%), el “marcador” (14%) y el “sembrador” (31%). Este último asume que existe un deajuste normal entre generaciones, lo que no supone una renuncia a su rol de adulto. Además, es el único que respeta la privacidad de sus hijos al no invadir el espacio de ellos en internet.
Prejuicios. Con capacidad multitasking y una inteligencia visual más desarrollada, los niños de hoy paracen saber más que los adultos sobre tecnología. Pero los expertos llaman a no sobrevalorar la pericia tecnológica de los chicos. “Es cierto que estas tecnologías tienen una ‘interfase’, una presentación, que hace intuitivo su uso, y especialmente las nuevas generaciones se vinculan con estos dispositivos fácilmente, pero eso no significa que pueden lidiar en todas las dimensiones que se abren. Allí la presencia de los adultos resulta fundamental”, opinó el psicólogo Sergio Ballardini, director de proyectos de la Fundación Friedrich Ebert.
Tampoco sirve culpar a la tecnología de aislar o alejar a los hijos. “Muchas veces se utilizada como una suerte de “chivo expiatorio” en el que los padres depositan gran parte de su frustración de la crianza. Hay papás que dicen: “Mi hijo prefiere la play antes que salir a jugar con sus amigos”. Los padres demonizan la tecnología, no ven que hoy la vida online es parte de la vida offline, no hay una diferenciación”, explicó Czarny.
Los especialistas recomiendan fomentar criterios de cuidado y protección en los niños, pero siempre respetando su intimidad.“No hay que confundir controlar con enseñar a cuidarse. Que los chicos generen un espacio propio es la mejor manera de transmitirles confianza en sí mismos y de cuidar sus espacios íntimos”, opinó Czarny. Por su parte, Ballardini expresó: “Los adultos tienen que controlar su ansiedad y ser respetuosos de la construcción del mundo íntimo y privado de sus hijos”. Por lo tanto, la clave parece ser equilibrio, proximidad y mucho diálogo.
Tener un iPad propio: nuevo rito de iniciación
Antes se estilaba entregarles a los hijos una copia de las llaves como muestra de “mayoría de edad” o de “presentación en sociedad”, pero ahora los aparatos tecnológicos se transformaron en el primer objeto “propio” de los niños; algo así como un rito de iniciación. Según el estudio “Los chicos y adultos online: nuevos desafíos para la crianza”, los iPads y tablets son las tecnologías más concedidas por los padres con 47% en Brasil y en México y 40% en Argentina, mientras que los iPods tienen una penetración del 13% en México y el 8% en Argentina y Brasil.
Los niños utilizan los dispositivos con diferentes motivaciones. En primer lugar, con fines lúdicos. En México, los utiliza para juegos el 66%, en Brasil el 64% y en Argentina el 61%. Conectarse para chatear con sus pares se ubica en el segundo lugar, seguido por el uso de las redes sociales. Mirar televisión a través de los dispositivos, escuchar y descargar música y/o videos también son algunas de las principales motivaciones a la hora de estar online.
En cuanto a las redes sociales preferidas, se observa una fuerte penetración de Facebook (72% en la Argentina), seguido por YouTube (46%) y Twitter (16%). La conexión de los niños es diaria en más del 67% de los casos. El living y el comedor son los ambientes más utilizados para conectarse habitualmente. Si embargo, más de un tercio de los niños lo hace desde la “privacidad” de su dormitorio, más frecuentemente en Brasil y México.