En el país, la mortalidad por cáncer de mama está disminuyendo un 2% anual, según datos del Instituto Nacional del Cáncer. Aunque hay diferencias entre las provincias, hoy la detección temprana hace que menos pacientes debuten con la enfermedad avanzada (metastásica). En la mayoría de las mujeres, se realiza una cirugía para remover el tumor. En virtud del estadio de la enfermedad, también quimioterapia, radioterapia, hormonoterapia y/o terapia biológica.
“Donde más se revolucionó el tratamiento es en la enfermedad metastásica. Para las pacientes HER2 negativas, hay nuevos fármacos que son inhibidores de quinasas dependientes de ciclinas que duplican el tiempo que la paciente puede vivir sin que la enfermedad progrese. Para las HER2 positivas hay toda una línea de terapias específicas para la enfermedad que aumentaron mucho la sobrevida (de un año a una media de seis). Donde todavía falta seguir avanzando es en el cáncer de mama triple negativo”, señaló Cáceres.