La energía que emiten las burbujas cuando revientan podría ser utilizada para destruir células cancerosas en el cuerpo de los pacientes afectados por la enfermedad. Científicos de la Universidad de Oxford esperan poder aplicar pronto la nueva técnica en tumores ubicados en riñón e hígado, para reducir así los riesgos derivados de eventuales cirugías.
Un grupo de investigadores británicos construyó un aparato para transmitir las ondas de ultrasonido al cuerpo del paciente con el objetivo de generar burbujas en el lugar donde se encuentra el tumor, informó hoy el sitio de la BBC.
La tesis de los científicos es que cuando esas burbujas explotan, se puede aprovechar la energía que emanan en forma de calor para eliminar las células malignas.
El equipo británico planea aplicar su nueva técnica en pruebas clínicas. De acuerdo al informe que presentaron los especialistas, será usada en el tratamiento de pacientes con tumores en riñón e hígado.
Los ensayos clínicos del método que se denomina ultrasonido enfocado de alta intensidad son conducidos por el Hospital Churchill, en la ciudad británica de Oxford. El informe destacó que esa técnica evita la intervención quirúrgica y señaló que los primeros ensayos, demostraron ser eficaces para realizar una operación sin los riesgos de la cirugía.
Las primeras pruebas se hicieron en pacientes terminales con tumores aislados en riñones e hígado, órganos que pueden ser más difíciles de alcanzar por medio de intervenciones quirúrgicas.
La nueva técnica enfoca a las ondas de ultrasonido en áreas específicas del cuerpo y genera un calor localizado con el que se matan las células dañinas.
Sin embargo, el método presenta distintos inconvenientes: es muy lento y los resultados sólo pueden ser observados una vez finalizado el tratamiento.
Fuente: Télam