Ya está: y se dio el primer paso. Ya el negocio puso otra vez a andar esta rueda impresionante que es una Copa del Mundo; una rueda imparable, que se multiplica. Joseph Blatter nos venía diciendo que la FIFA nos iba a entregar casi el doble de premios de lo que entregó en Alemania, mientras vemos a esa Europa que hoy intenta tirar algunas migajas a aquellos que se despedazan. Esto es lo que le vamos a dar al mundo: poder. Porque ya no es sólo la contienda del fútbol. Mientras, miles y miles de millones de personas ya están enfrente de sus nuevos plasmas, LSD o como se llamen esos aparatos.
Pero mejor, hablemos de fútbol: en su presentación, ayer ante Nigeria, Argentina falló en la definición, y ésa es la primera conclusión. Después, ya en detalle: creó muchas situaciones de gol, sí, pero ¿cómo las creó? Por juego. Y la gran mayoría fue en jugadas, ¿pero esas jugadas fueron elaboradas? Sí, las más. Porque Argentina fue inteligente, presionó y recuperó la pelota. Y después, se aprovechó de la ingenuidad de Nigeria. Y a eso hay que sumarle un Lionel Messi genial. Pero también es cierto que Argentina creó mucho pero sólo ganó 1-0. No por nada, el arquero de Nigeria, Vincent Enyeama, fue elegido el mejor de la cancha...
Es que los rivales también juegan. El orden que tuvieron los nigerianos para atacar no fue el mismo que tuvieron para defender. Porque para atacar tenés que arriesgar y ellos, lo que se dice arriesgar, no querían, para no descubrirse las espaldas. Entonces apostaron a su velocidad, o a ganar una contra.
Tema Messi: jugó muy bien, pero no pudo definir las situaciones de que dispuso. En el Barcelona, y en situaciones semejantes, pica la pelota o la pone justo al lado del palo, o gambetea al arquero. Ayer, quería su gol, sí, pero no fue el del Barcelona definiendo.
Argentina no pudo aprovecharse de la tenencia, le faltó manejar la pelota o, mejor escrito, descansar con la pelota, para mover al rival y obligarlo a pensar: ¿cómo se la saco a estos tipos? Y ahí lo obligás a salir y entonces se generan espacios, se les gana las espaldas y quedan expuestos. En fin, está bueno ganar, el haber creado tantas situaciones motivan... Claro que uno piensa que el próximo rival es Corea del Sur, que le ganó muy bien a Grecia.
¿Soy optimista? Obvio, se ganó. Optimista, además, porque Messi mostró mucho más de lo que había mostrado en toda la etapa Maradona. Optimista, también, por las individualidades que tiene la Selección. Messi demostró que está lúcido, rápido y encendido. A todo eso hay que sumarle la tranquilidad que nos da el arquero. ¡Qué seguro que es en el juego aéreo! Un arquero como Sergio Romero te obliga a que mires para delante, porque está seguro en los centros, es muy atento y respondió bien en los tiros de media distancia.
¿Que hay que acoplar el equipo? ¡Obvio! Argentina no hizo fútbol desde el partido despedida con Canadá, no tuvo ningún amistoso desde entonces. Ahora hay que mejorar, ir de menor a mayor, pero el arranque, me permito decir, fue más que positivo.
*Periodista.