COLUMNISTAS

Llegamos

Por Jorge Fontevecchia | Debemos luchar contra el olvido de lo que pasamos, exigiendo a los nuevos gobernantes, desde el primer día, respetar la libertad de prensa sin dificultar la tarea de los periodistas ni la evolución de los medios. Galería de fotos

Octubre de 1983. Campaña de la revista La Semana.
| Reproduccion del diario ‘Clarin’

El libro Clarín: La era Magnetto, de Martín Sivak, cuenta que el domingo 30 de octubre de 1983, cuando se votaba tras el fin de la dictadura, el diario Clarín colocó como título el mismo que días antes había usado la revista La Semana (de Editorial Perfil y predecesora de la revista Noticias) y publicado incluso en el propio diario Clarín, entre otros, como aviso (ver reproducción). Sivak relata la diferencia entre uno y otro “Llegamos” que en el caso del de la revista La Semana tenía doble significación porque llegábamos a la democracia y llegaba del exilio el director de la revista al caer su orden de detención a disposición del Poder Ejecutivo.

Hoy el diario PERFIL vuelve a utilizar aquel “Llegamos” que, aunque con incomparables diferencias, comparte con aquel octubre de hace 32 años un punto en común en lo que se refiere a los medios de comunicación. Para las publicaciones de Editorial Perfil, cruzar estos doce años y medio del kirchnerismo fue un largo y esforzado camino enfrentando desde el primer día –el 25 de mayo de 2003– la discriminación y directa persecución de un gobierno que nunca utilizó la violencia física contra periodistas, como lo hacía la dictadura, pero sí todas las demás (que no son pocas).
 
“Llegamos” para los medios de Editorial Perfil tiene un significado emocional que nos hace sentir orgullosos de haber atravesado tantas dificultades desde el “Fideicomiso en contra de la discriminación con la publicidad oficial”, a comienzos de este diario, cuando los lectores hacían donaciones para pagar avisos que reemplazaran la publicidad oficial que aparecía en todos los otros diarios y revistas del país menos en los de Editorial Perfil, hasta el último acto del kirchnerismo con los medios al anular la Afsca justo las dos licitaciones de televisión digital en las que los fundadores de Perfil se habían presentado, con el único fin de impedir que le sean otorgadas a medios no alineados con el oficialismo, como sí pudieron hacer con las otras licitaciones de televisión digital donde los fundadores de Editorial Perfil no se presentaron.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite
Scioli y Macri, junto al presidente de la Corte Suprema, inauguraron la nueva sede de PERFIL.

Tras las elecciones, el estudio Cassagne Abogados estará presentando una demanda para que se declare la nulidad, ilegalidad e inconstitucionalidad de los decretos del Poder Ejecutivo de la Nación por los cuales se dispuso declarar inadmisible la oferta presentada por los fundadores de Editorial Perfil y el fracaso de los dos concursos en que participaron convocados por la Afsca. Y además se dicte una medida cautelar que impida al Poder Ejecutivo de la Nación y a la Afsca volver a licitar las mismas frecuencias que debieron ser otorgadas a los fundadores de Editorial Perfil.

En la edición de ayer, el diario PERFIL publicó un suplemento sobre su nuevo edificio, que incluye tres estudios de televisión broadcasting, dos de televisión digital y tres estudios de radio, además de la mayor redacción multiplataforma de Sudamérica. Inversión que sólo puede justificarse en la idea de que se llegó a algún lado, a un lugar distinto.

Y fue muy importante contar el viernes en la inauguración con la presencia de los cuatro candidatos presidenciales con mayor intención de voto: Daniel Scioli, Mauricio Macri, Sergio Massa y Margarita Stolbizer, como que el corte de cintas haya sido protagonizado por los dos candidatos con posibilidad de ser electos presidente, Scioli y Macri, además del presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti.
 
Que el futuro presidente del país, junto al presidente de la Corte y mayor representante del Poder Judicial, inauguren las instalaciones de un medio de comunicación, después de tantos años de beligerancia del Gobierno contra los medios privados, es una señal del cambio que se avecina.
También es un síntoma de madurez política de los dos principales candidatos: Scioli y Macri, que no habiendo debatido, por lo menos el último día hábil antes de la elección y el primero de la veda electoral, se hayan podido saludar en público delante de toda la prensa que cubría la inauguración.

Hoy, en esta edición limitada en su análisis político por la veda electoral, elegimos realizar un reportaje al más famoso intelectual de izquierda del mundo, Noam Chomsky, quien con sus decenas de libros fue fuente de inspiración de la mayoría de los intelectuales de Carta Abierta para construir su visión sobre los medios.

Tras años de grieta, es una señal que el futuro presidente inaugure el edificio de un medio privado.

La influencia de Chomsky en el tema medios es universal: él llamó al diario The New York Times “perro faldero” de las elites. En internet se interpretó su postura en un artículo titulado “10 estrategias de manipulación mediática”, que serían: distracción, crear problemas y ofrecer soluciones, la de gradualidad, la de diferir, la de dirigirse al público como criaturas de poca edad, la de utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión, la de mantener al público en la ignorancia y la mediocridad, la de estimularlo a ser complaciente con la mediocridad, la de reforzar su autoculpabilidad y la de conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen.

Milan Kundera escribió que “la lucha del hombre contra el poder es la lucha de la memoria contra el olvido”. El olvido sería la undécima técnica de manipulación mediática, algo a lo que apelan tanto el mal periodismo como la propaganda estatal.

Ahora que “llegamos” al fin de un ciclo de persecución al periodismo, debemos luchar contra el olvido de lo que pasamos, exigiendo a los nuevos gobernantes, desde el primer día, respetar la libertad de prensa sin dificultar la tarea de los periodistas ni la evolución de los medios.