No sucedía desde los gloriosos tiempos del ya legendario "Mediodía con Mauro", desde los alocados años '90 en que el caso Coppola calentaba la pantalla, Jacobo Winograd era un verdadero protagonista de la realidad nacional y siempre, indefectiblemente, alguien se cagaba a trompadas en el programa de Viale. Sí, hacía tiempo que no se televisaba una paliza en vivo del calibre de la que sucedió entre miembros del séquito de Zulma Lobato. En plena y colorádísima pantalla de "Hechos y protagonistas", por Crónica TV. A la luz del día y con todos los ingredientes: patadas, sangre, insultos y una Anabela Ascar poniéndose más pálida de lo que ya es de por sí. Inclusive, más pálida de lo que se pusieron las autoridades del canal cuando se enteraron que tendrían que darle explicaciones al Comfer y -muy probablemente- fumarse una multa de unos 12 mil pesos.
Claro que, de los tiempos en que algunos invitados de cuestionables modales pretendían boxear a Mauro hasta la fecha, han surgido algunas tecnologías que cambiaron la forma de propagar los papelones televisivos más sonoros. Porque, por supuesto, en aquellos tiempos, no había YouTube. Hoy, en cambio, no sólo se puede ver la divertidísima escena de pugilato en las sucesivas repeticiones de Crónica -que no se cansa de volverla a pasar, lo que le puso los pelos de punta al Comfer- sino que casi 50.000 personas en menos de dos vías vieron el papelonazo en las pantallas de sus computadoras.
Desde los tiempos del Imperio Romano, la fórmula "pan y circo" ha funcionado infaliblemente para mantener entretenidos a los sectores populares. El éxito de programas como los de Tinelli, Weich o Marley no hacen más que probarlo. Que no hace falta calidad, ni ingenio, ni contenidos. Con el circo alcanza. Claro que el circo se pone mucho más divertido cuando tiran un par de cristianos a los leones. Y la pantalla de Crónica justifica el rojo de su placa con la sangre de un montón de ignotos e irrelevantes que cumplen con la maravillosa función de entretener el morbo ajeno con una escenita patética que, sin embargo, califica rápidamente como lo más visto de la semana.
Será cuestión, quizás, de producir un lindo reality show. Castañazo TV, por ejemplo. Como para que las masas mantengan los ojos y el cerebro lejos de los noticieros.
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* Escritor y periodista, autor del libro "Hablalo con mi abogado"
