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Un nuevo tipo de libro se abre camino: el lector puede interactuar con los personajes

Un robot habla con otro robot sobre literatura, mientras uno de ellos, adopta el rol de un escritor humano fallecido. El lector es testigo de cómo el lenguaje humano resulta intervenido por la Inteligencia Artificial avanzada. El 7 de agosto estará disponible un libro digital de George Orwell: “Rebelión en la granja”, bajo la forma de Living Books, que puede traducirse como Libros Vivientes, pero también como Libros para Vivir. Ha nacido un nuevo tipo de libro digital.

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Orwell. El escritor británico falleció en 1950. La primera edición de Animal Farm (1945) y una de las tantas traducciones al español del mismo libro, que se conoce como Rebelión en la granja. | cedoc

Librarian AI (LAI): Gracias por acompañarnos hoy, ‘Robot’ George Orwell. Es un honor tener la oportunidad de hablar contigo sobre Animal Farm. Para empezar, ¿podrías hablarnos sobre la inspiración detrás del libro y qué te llevó a escribirlo?

‘Robot’ George Orwell (RGO): Es un placer estar aquí. Animal Farm se inspiró en mi desilusión con la Unión Soviética y su régimen totalitario bajo Joseph Stalin. El libro sirve como una alegoría de los acontecimientos que condujeron a la Revolución Rusa y el posterior ascenso del estalinismo. Quería crear un cuento con moraleja que advirtiera sobre los peligros del poder y la traición de los ideales revolucionarios.

Los dos párrafos iniciales pertenecen a un breve reportaje a la versión en Inteligencia Artificial (IA) del escritor británico George Orwell (1903-1950), el mismo se publicó hace dos meses, en el blog de la compañía Legible (medium.com/legible-media). En apariencia, las preguntas las realiza otra IA que pertenece a uno de los servicios de esta empresa especializada en el desarrollo de libros digitales para lectura online, sin necesidad de dispositivos de lectura ni aplicaciones patentadas. Sí, leímos bien: un robot habla con otro robot sobre literatura mientras uno de ellos adopta el rol del escritor humano fallecido. Para el lector es ser testigo de cómo el lenguaje humano resulta intervenido por la inteligencia artificial avanzada, o creatividad artificial.

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En el ajedrez de los negocios a escala global, la movida de piezas anterior fue apenas un ejercicio. Legible acaba de anunciar que el 7 de agosto estará disponible un libro digital de George Orwell, Rebelión en la granja (Animal Farm), bajo la forma de Living Books, que puede traducirse como Libros Vivientes, pero también como Libros para Vivir. Este tipo de libro digital “transforma el entorno de lectura con experiencias dinámicas y memorables, allanando el camino para la integración de aplicaciones AR, VR y Metaverso”, y a partir de la nueva versión de Rebelión en la granja, también con el uso de Inteligencia Artificial generativa. 

“Esta versión permitirá a los lectores interactuar con los personajes y discutir los eventos a medida que se desarrollan. El público realmente puede sumergirse en los elementos temáticos. Un personaje clave discutirá cada consulta y mantendrá una conversación con el lector.” Estas oraciones se leen en la información de prensa del lanzamiento. Desde ya, las “conversaciones del lector” con personajes serán con la IA que representa al libro, más allá del Orwell artificial. Vale decir, se podrá leer consultando a un comentarista 100% virtual.

Tal modelo de producto para la lectura, patentado como AI-Living Book, es la punta del iceberg de un acuerdo entre Legible Inc. y Genius Brands International, gigante en medios para niños, que actualmente declara trabajar en gran variedad de contenido moderno para familias. De allí surgirán una gran variedad de libros vivientes interactivos que, subrayan, los colocará a la vanguardia de la tecnología de narración literaria. Esta posición de privilegio apunta a 2.700 millones de teléfonos inteligentes en el mundo, potenciales lectores que solo requieren conexión a internet para comprar los libros electrónicos, o leer desde cualquier navegador. 

Y, otra vez, el paradigma de hace quince años, con la aparición de los libros digitales: ¿el libro electrónico reemplazará al libro en papel? Esta nueva avanzada con “animación de personajes” y autores “resucitados”, ¿no llevará también al reemplazo del texto mismo por otro que se adapta a las “nuevas audiencias”? ¿El futuro depara un vértigo donde, cada diez años, Rebelión en la granja se actualice como novela viviente, modificando personajes, diálogos, párrafos enteros, de acuerdo a los diálogos que la IA tuvo con los lectores? Entonces el fantasma será la interactividad, cuya secuela efectiva llevará a la adulteración de la obra.

Pero hay otras noticias respecto a la llegada de la IA y su efecto, confirmando que podemos ser pesimistas en un rango doméstico, como el laboral. El 2 de junio pasado, The Washington Post publicó un artículo titulado “ChatGPT tomó sus trabajos”, donde se explica que los chatbots van tras los trabajos humanos bien remunerados, esto en dos casos concretos: Olivia Lipkin, 25 años, redactora publicitaria en una empresa de San Francisco; y Eric Fein, 34 años, redactor creativo de contenido durante 10 años en modo home working.

Desde noviembre último, fecha en que se lanzó ChatGPT, ambos experimentaron la degradación de sus oficios. La primera fue reemplazada por la Inteligencia Artificial perdiendo su trabajo sin explicación alguna. El segundo sufrió la pérdida sostenida de sus clientes y ya no alcanza con los que trabajan con él. Hoy, Olivia pasea perros para tener un ingreso de dinero, mientras que Eric comienza un curso de plomería, donde la IA no tiene habilidades, y destaca: “Es una batalla cuesta arriba contra una criatura que ya me reemplazó y continúa mejorando y adaptándose más rápido de lo que cualquier humano podría seguir”.

En la misma nota, según Ethan Mollick, profesor asociado de la Escuela de Negocios Wharton de la Universidad de Pensilvania: “En todas las amenazas de automatización anteriores, la misma consistía en automatizar los trabajos duros, sucios y repetitivos (…) Esta vez, la amenaza de la automatización está dirigida directamente a los trabajos más creativos y con mayores ingresos que requieren la mayor cantidad de formación”.

Tal vez, en unos años, este artículo lo escriba una IA refiriendo a cómo otra IA le cuenta al lector humano, mientras duerme, sobre qué ocurre en la sociedad a raíz de la falta de lectura.