CULTURA
Artista interactivo

A Botero le encanta que acaricien sus esculturas

El escultor colombiano asegura que la comunicación directa entre el público y la obras es la mayor recompensa que puede tener un artista. Dieciséis de sus obras se exponen al aire libre en Berlín.

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| AFP

Al escultor colombiano Fernando Botero le encanta que la gente toque sus esculturas, porque considera que la comunicación entre artista y público es la mayor recompensa a su trabajo.

Así lo aseguró hoy, en una rueda de prensa en Berlín, en la que presentó su nueva exposición en el centro de la ciudad.

La muestra, compuesta por 16 esculturas de bronce, ya puede contemplarse en la vía pública berlinesa, pese a que la inauguración oficial no será hasta mañana. En la plaza Lustgarten, en el centro histórico de la capital alemana, frente a la Catedral y al Altes Museum, hay colocadas quince de ellas, mientras que tan sólo una, Caballo 06 , se encuentra junto a la Puerta de Brandemburgo.

" Ver a la gente disfrutando en ese jardín es la mayor satisfacción para un artista", dijo Botero. " El artista crea su obra para proporcionar placer, para lograr comunicación con el público", añadió. Precisamente, el problema que representa a veces el arte moderno es que no permite comunicación entre creador y público, sino que el artista se guarda el misterio de su obra para sí, expuso Botero, uno de los principales representantes del arte latinoamericano.

Desde el fin de semana, los visitantes se han acercado a las esculturas libremente. Muchos de ellos, asombrados por su magnitud, incluso las escalaron. " Ese es el peligro que existe siempre cuando haces este tipo de exposiciones al aire libre. Muchos no tienen educación. Hay que arriesgar eso", dijo Botero.

" Sin embargo, al tocar existe comunicación y eso es bueno, aunque sea con las personas equivocadas", subrayó con humor.

Fuente: DPA