Las chances de Boca de pasar a la segunda fase de la Copa Libertadores comienzan a definirse: en Chile, desde las 20.10 y con televisación en directo por Fox Sports, el local Colo Colo se juega ante los venezolanos de Unión Maracaibo una carta fundamental para llegar a la última fecha del Grupo arriba de los xeneizes, que por ahora los superan por un punto.
Sólo en caso de que los chilenos pierdan o empaten, efectivamente, el equipo de la Ribera logrará llegar a la jornada decisiva del martes 22 de abril próximo sin la obligación de ganar ante los venezolanos, lo que deberá hacer incluso por varios goles si, como se prevé, esta noche el conjunto transandino hace valer su localía para llevarse un triunfo por goleada.
En caso de que esa victoria abultada se dé, concretamente, en la fecha final Boca debería marcar un gol más de los que haga esta noche Colo Colo y esperar que los de Santiago no ganen como locales ante Atlas para asegurar su clasificación, que lograrían así igualmente no como primeros del Grupo sino secundando a los mexicanos.
Si en esa última jornada los chilenos triunfan, en tanto, el conjunto argentino tendrá aún chances de seguir en la Copa, para lo que tendrá también que ganar y quedar con mayor diferencia de gol que un elenco mexicano que hoy lo supera en ese ítem por +5 (producto de diez goles convertidos y cinco sufridos) a 0 (Boca convirtió nueve y le marcaron igual cantidad).
Vale decir que, de ganar Colo Colo esta noche y también el martes 22, Boca igualmente estaría obligado a impnerse por goleada para clasificarse segundo en lugar del Atlas, ya que ambos quedarían igualados en esa colocación con diez puntos y por lo tanto la diferencia de gol -que como quedó claro es muy favorable a los mexicanos- entraría a jugar en un papel decisivo.
De imponerse esta noche como todo hace imaginar que lo harán, en definitiva, los chilenos aprovecharán la derrota sufrida por el equipo de Ischia en México para desplazarlo de la segunda colocación y aventajarlo por dos puntos en la tabla del Grupo 3, con nueve unidades contra siete de los xeneizes. Una ventaja que, a esta altura de las circunstancias, puede ser lapidaria para Boca.