Se llama Kevin Felippo, es argentino y con sólo 10 años se ha convertido en la nueva esperanza de Ferrari. Kevo, como le dicen sus conocidos, acaba de ingresar a la Academia de pilotos de la escudería italiana, que lo fichó tras comprobar su precoz habilidad al volante. Así, se convirtió en el primer representante de nuestro país que alcanza semejante logro.