La idea surgió en medio de la reunión que juntó a Cristina Fernández de Kirchner con las ocho campeonas mundiales de boxeo que tiene la Argentina. Allí, entre bromas e improvisadas sesiones de “guanteo” que mostraron a la Presidenta ensayando algunos golpes, cada una contó su experiencia de vida y la mandataria dio el puntapié inicial para la iniciativa: dar clases de boxeo gratuitas en todo el país como un medio de contención social.