El maestro Roberto De Vicenzo consideró esta noche que "la llave" del resonante triunfo de Angel Cabrera en el Masters de Augusta de golf "estuvo en la seguridad y concentración" del cordobés en el desempate. "Lógicamente, todo campeón tiene un poco de suerte, como cuando en el primer desempate sacó la pelota entre los árboles y, al sacarla, rebotó en un árbol y quedó cerca del hoyo", continuó diciendo el ganador del Abierto Británico de 1967.
Además, De Vicenzo dijo por Radio Rivadavia que al ver a Cabrera con el tradicional saco verde se le cayeron "un poquito lás lágrimas" porque recordó el Abierto de Augusta de 1968, cuando por firmar mal una tarjeta quedó fuera del desempate. "Cabrera ya ganó dos Majors, pero todavía puede ganar más porque aún es jóven. Fue muy emocionante y al final, hubo un regalo de Pascuas", agregó el maestro.
De Vicenzo continuó resaltando que Cabrera se lució "de manera espectacular" y aseguró que al estadounidense Kenny Perry, quien jugó el desempate con el oriundo de Villa Allende, lo vio "muy mal, cansado, desconcertado y desarmado" en la definición. "No creo que Cabrera me dedique el título porque tiene 45 años menos que yo. Los viejos estamos un poco olvidados y el deportista tiene que vender un poco el alma al diablo", finalizó De Vicenzo.
Fuente: DyN.