Mientras el líder de la barra brava de Boca Juniors, Rafael Di Zeo, ingresó ayer sin problemas a La Bombonera para presenciar el partido que los xeneizes le ganaron por 2-1 a Argentinos Juniors, en Avellaneda sí hubo restricciones en el ingreso para hinchas con antecedentes de participación en hechos de violencia.
En la cancha de Racing, donde Independiente hizo de local en el empate cero a cero frente a River, se aplicó el derecho de admisión y se les negó el acceso tanto a Alan Schlenker, uno de los jefes de “Los Borrachos del Tablón”, la barra millonaria, como al Bebote Alvarez, de Independiente.
Al “Rafa” Di Zeo sólo se le practicó un cacheo liviano y se le permitió entrar al escenario donde luego Boca le ganó a Argentinos, por la decimotercera fecha del torneo Apertura de Primera División.
En cambio, en Avellaneda, jurisdicción del Comité Provincial de Seguridad Deportiva (COPROSEDE), una vez que se los reconoció se les prohibió la entrada tanto a Schlenker como a Alvarez, a pesar que ambos concurrieron acompañados por asesores legales.