DEPORTES

El oscuro momento de la Selección argentina

El equipo de Sabella, que el martes juega contra Colombia un partido clave, falla en todos los aspectos. Culpas compartidas y futuro incierto.

Messi no puede creer lo que le pasa a la Selección.
| Fotobaires

Después del empate con Bolivia, Alejandro Sabella tuvo poca autocrítica (“Mao decía que la autocrítica es un síntoma de debilidad y un poquito de eso hay”, le decía al diario Olé el miércoles). Entre los aspectos a mejorar, el entrenador se refirió a la “búsqueda de equilibrio” y a que Messi “encuentre una mejor compañía”. Aún no pudo lograr ninguna de las dos. El último intento fue darle la titularidad a Javier Pastore para que se asocie con Leo, pero sus encuentros fueron en cuentagotas. Falta de estilo, cambios de nombres y de esquema son el común denominador de estos tres partidos.

Uruguay es el equipo de moda en Sudamérica. Semifinalista del Mundial de Sudáfrica y último ganador de la Copa América, su trabajo esta sostenido desde hace varios años por un proyecto que le sigue dando sus frutos. Ahora es el único líder de las Eliminatorias y uno de los dos invictos –el otro es Colombia. Su técnico, Oscar Tabárez, logró darle identidad al equipo y encontró una alineación titular: repitió formación y esquema en los dos primeros encuentros y cambió dos nombres contra Chile. Usó apenas 13 titulares y 17 jugadores en total. La contracara es Sabella: tres partidos, tres esquemas diferentes (4-4-2 ante Chile; 3-4-1-2 en Venezuela y 4-3-3 el viernes) y dieciocho titulares diferentes; 23 si se tienen un cuenta los suplentes. Sólo cuatro jugadores jugaron desde el inicio en los tres partidos: Zabaleta, Burdisso, Messi e Higuaín. Justamente ellos fueron los únicos que no dejaron el equipo respecto de la derrota con Venezuela. La búsqueda aún no trajo resultados.

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