El arbolito de Navidad del boxeo argentino puede tener esta noche su gran regalo de 2013. Lejos del ruido y la lujuria insomne de Las Vegas e inmerso en el cansino ritmo de una ciudad que atesora historias de cowboys, matadores y muchachitos malos, el santafesino Marcos René Maidana afrontará la pelea más importante de su carrera ante el invicto tricampeón mundial norteamericano Adrien Broner, quién expondrá su corona welter AMB, en el mítico estadio Alamodome de San Antonio, Texas (televisa Space desde las 22 y se prevé que la pelea de fondo comience pasada la medianoche de Argentina).
La pelea que Marcos Maidana afrontará hoy reúne todos los condimentos de eso que da en llamarse el punto de inflexión. Gane o pierda, el combate dejará mucha tela para cortar y permitirá perfilar qué rumbo tomará la carrera de un boxeador que sin escándalos y con un estilo sostenido en su pegada y guapeza acepta pelear siempre contra los mejores.
Será, según se anuncia, un duelo al estilo western: “Danger zone” (zona de peligro). Es que más allá del título publicitario, se huele en el ambiente que esta noche habrá una batalla de estilos sobre el ring del Alamodome. Y no sólo se polarizan sus formas de boxear: las actitudes también son muy diferentes.
Estilos opuestos. La humildad y tranquilidad del Chino Maidana contrasta con el egocentrismo del campeón mundial. Un rápido inventario de declaraciones lo confirma:”Maidana es un boxeador unidimensional (frontal) y no tiene variantes. No está en mi nivel. Lo voy a encender y apagar como a un árbol de navidad”, opinó con sorna Broner sobre el santafesino.
Adrien Broner consolidó en menos de dos temporadas una posición codiciada en el ámbito pugilístico, al capturar tres coronas mundiales en pesos diferentes (superpluma, ligero y welter) entre 2011 y 2013. Apodado “El Problema” por su personalidad irreverente y el pasado bravo en las calles de Cincinnati, se deleita sabiendo que, por ahora, las cosas arriba del ring se hacen a su manera en base a talento, potencia y personalidad.
Sin tener el brillo que pretende el espectáculo pugilístico en los Estados Unidos, Broner hace de las suyas y le sobra categoría para estar considerado el sucesor de Floyd Mayweather y uno de los mejores libra por libra del momento. Su estilo no es de un tirador de golpes. Es más un especialista en esquivarlos, pegar con certeza y volver a esquivar. Y, si es necesario, hacerlo huyendo del rival por el ring. Es parte de su estrategia, pero también uno de los secretos de su eficacia. Sin embargo, hay un gran enigma en torno a su probable rendimiento ante Maidana; por primera vez se enfrentará con un peleador fuerte, grande y avasallante que tiene una pegada terrible. Y que, por primera vez en su carrera, cobrará cerca de un millón de dólares por subirse al ring.
Enigmas. ¿Podrá Marcos René Maidana ser el hombre que además de probarlo a fondo le haga sentir el rigor de las manos como no pudieron otros? En esa respuesta, sin dudas, estará una de las claves de la noche de San Antonio.
Por lo pronto, el Chino Maidana se quiere convertir en el Papa Noel del boxeo argentino y dejar bajo el arbolito de Navidad el mejor regalo del 2013. ¿Podrá?
