La prima de Jorge Capitanich encendió la polémica luego de que manifestará que el gobernador de Chaco había mantenido contactos con barrabravas de Boca y River para evitar enfrentamientos antes, durante y después del superclásico que se jugará mañana en Resistencia. Rápido de reflejos, Coqui desmintió el diálogo. “Lo que va a estar garantizado es que los que no tienen que entrar a la cancha entren”, dijo, en diálogo con 442, Juan Manuel Lugones, el abogado que encabeza la ONG Fútbol en Paz en la Argentina.
“Un gobernador de una provincia empobrecida y quebrada como es Chaco debería ocuparse de esas cuestiones y no de andar garantizando la seguridad de los barras”, manifestó el letrado que ayer presentó una denuncia contra Capitanich por el “supuesto arreglo”. “No lo inventamos nosotros -agregó Lugones-. Lo contó la prima que es la organizadora del partido”.