Nadie está por encima de Newell’s. Ni en puntos ni en juego. El golpe de ayer, sin embargo, le sacudió las víseras: Vélez le cortó el invicto y al final le quitó la pelota al equipo que siempre la tiene.
Newell’s puede hacer su propio recorte y guardarlo en el archivo. Cuando pierda el rumbo, deberá buscar esos diez primeros minutos del partido jugados con profundidad y elegancia. Newell’s no es una pose. Alfredo Berti extiende esa manera de Martino de buscar con un estilo agresivo y solidario. El equipo es ancho y se despliega para evitar ser previsible. La foto es Bernardi conduciendo el ataque con tres opciones de pase. El volante decidió abrir la jugada y que la resolviera Víctor Figueroa, que entraba por izquierda. El aquero Sosa frustró el gol de un equipo que en una sola jugada demostró toda su esencia. A eso se repuso Vélez. Y ganó con justicia.
Duelo. El pragmatismo lo encarna Vélez. Compacto y con oficio, superó el momento tsunami de su rival, que de a poco perdió fuerza. Los volantes del equipo local son todoterrenos que corren, presionan y juegan; en ese orden. Los nacidos y criados en Vélez Agustín Allione, Héctor Canteros, Lucas Romero y Alejandro Cabral equilibraron a su equipo y, además, contaron con la ayuda del outsider Pratto. El delantero arranca desde la zona media y acelera hasta los metros finales. Pura potencia, el que encorva el lomo y apunta ayer fue protagonista de los goles. La primera perla fue de penal: ajustició a Guzmán con violencia. Después se encargó de buscar la pelota atrás y armar un unipersonal con su sello: giró entre dos, recorrió unos metros y en modo Magic Johnson miró para un lado y soltó el pase hacia el otro para habilitar a Cáseres. El chico que poco antes había entrado por Rescaldani definió entre las piernas del arquero. Cerca del final, los mismos intérpretes en acción. Pratto pateó, Guzmán dio rebote y el atento Cáseres empujó al gol.
Los dos últimos campeones jugaron un partido acorde a su chapa. Intensos y ofensivos, nunca especularon. Newell´s pudo empatar con un cabezazo de Víctor Figueroa, que falló solo, en el punto penal. Vélez, ordenado, logró ampliar la diferencia y desalentó la reacción de Newell’s. En el entretiempo la gente de Vélez aplaudió a su equipo, pero el reconocimiento era general. En todo caso, estaba implícita la ovación a Newell’s.
Newell’s ayer perdió el partido pero no la forma. Vélez, en tanto, recuperó confianza y descontó puntos en la carrera por el título. Dos candidatos se cruzaron. Ganó Vélez, pero no perdió ninguno.
